(VÍDEO: F. VEIGA)
Cámaras en los principales accesos al Centro histórico y en los cruces más peligrosos. El área de Movilidad reforzará el control de los infractores a través de la instalación de sistemas que capten las matrículas y que faciliten una sanción posterior. Los proyectos se activarán en sólo unos meses.
Con el proyecto de restricción de la circulación de los vehículos al Centro de la ciudad ya adjudicado e impulsado con la mirada puesta en realizar los primeros ensayos antes de fin de año, el delegado de Movilidad, Francisco Fernández, anunció ayer otra iniciativa que se activará a corto plazo y que servirá para reforzar el control de los semáforos con más siniestros: la instalación de unas cámaras que tomarán imágenes de los vehículos que no respeten la orden de detención y que se activarán cuando salte la luz roja. Estas fotografías pasarán a la centralita desde donde se tramitará la sanción correspondiente.
"Se trata de ubicar estos sistemas en los cruces estratégicos de la ciudad, en los que se detectan habitualmente más siniestros debido a infracciones cometidas por los conductores", explicó el delegado de Movilidad. El proyecto se activará inicialmente en cinco puntos de la ciudad: en la glorieta Kansas City-Avenida del Greco, en Cardenal Bueno Monreal, en la Ronda del Tamarguillo, en Luca de Tena y en un quinto punto, cuya ubicación depende de los estudios que realizan en estos momentos los técnicos municipales. Las imágenes que se capten podrán provocar multas de hasta 150 euros, según la actual normativa de graduación de sanciones de tráfico del Ayuntamiento de Sevilla.
Precisamente este endurecimiento del control de las infracciones provocó el pasado mes de marzo una revisión de este catálogo -marcado por los errores en su publicación que han obligado al Consistorio a modificarlo en varias ocasiones- con el objetivo de incrementar las multas. En torno a 70 infracciones se situaron entonces en su máximo legal, una medida que afectó a algunas de las irregularidades más habituales, según los estudios municipales, como son no ceder el paso en una parada de bus -la multa se elevó a 120 euros-, aparcar en un rebaje de la acera -120 euros-, estacionar en un paso de peatones -hasta 200 euros-, y no respetar un ceda el paso -120 euros-. Todas ellas experimentaron subidas de entre un 20 y un 50% sobre su coste inicial.
En este proceso se enmarca otro proyecto, de momento paralizado por los sindicatos, y que tiene también como elemento esencial las imágenes fotográficas de los vehículos: la nueva grúa telemática: El objetivo de este sistema es evitar que la Policía tenga que estar presente en el momento de la retirada de un vehículo. Bastará con que uno de los operarios tome una imagen y la remita por vía telemática a una centralita con agentes de Policía que darán el visto bueno tras revisar las fotos.
