La Asamblea de trabajadores del parque temático de Sevilla Isla Mágica ha ratificado hoy el acuerdo por el que la empresa despedirá a 17 trabajadores, frente a los 31 inicialmente anunciados, y a seis directivos tras la compra del parque por parte del grupo francés Looping Group. La presidenta del comité de empresa, Ana Pérez Luna, explicó que en una asamblea a la que han asistido 150 empleados (el parque cuenta con 300 trabajadores en plantilla y otros tantos eventuales subcontratados) y tras un intenso debate "porque la gente tenía muchas dudas", el acuedo ha sido ratificado por el 89,74% de los votos. Una vez aprobado el acuerdo en la asamblea, será firmado y los despidos se harán escolanadamente ya que "cada uno tiene su fecha". Estos despidos serán indemnizados con 45 días por año trabajado. Igual compensación recibirán los trabajadores fijos que trabajaban 12 meses y ahora pasarán a trabajar ocho o nueve. Además, la empresa ha puesto encima de la mesa una bolsa de 350.000 euros para compensar económicamente a los trabajadores que verán reducidos el número de horas que trabajan al año "porcentualmente a lo que pierden". Un total de 150 trabajadores del colectivo de fijos discontinuos por horas que gozaban de una garantía de 900 horas laborales al año pasarán a tener garantizadas 780 horas y el resto, con 800 horas anuales, pasarían a contar con una garantía de 680 horas anuales. La reducción horaria es fruto del recorte en 12 días en el calendario de apertura del parque aprobado para esta temporada, inaugurada el Sábado Santo. Looping Group, que se convertirá en accionista mayoritario tras comprar la empresa a Caixanbank (que la asumió al absorber Cajasol) tampoco tiene previsto abrir este año en Navidad como era tradicional en los últimos años, aunque la campaña de Navidad no entraba en el calendario laboral y trabajaban en ella quienes voluntariamente se apuntaban. Por otra parte, Looping Group, que anunció una inversión de cinco millones en el parque temático para nuevas atracciones, tiene previsto crear una zona de atracciones totalmente acuáticas (los parques que regenta en Europa son en su mayoría de este tipo). Para ello, ya cuenta con el permiso necesario de la Junta, según la presidenta del comité de empresa.