Que la remodelación de todos los estamentos del Real Betis en los últimos años ha sido prácticamente completa es algo que salta a la vista, especialmente desde la llegada de los administradores judiciales de las acciones de Farusa, que desde que se hicieran cargo de la entidad en diciembre de 2010 le han dado un lavado de cara casi total.
Pero si hay un grupo que se ha visto especialmente afectado por los cambios ese ha sido la plantilla, y es que del equipo que consumó el descenso a la Segunda División en la temporada 2008/09, sólo quedan tres efectivos que cuentan para Mel en el regreso a la élite del equipo verdiblanco.
Ayer se confirmó que Juande ha iniciado el camino de las rescisiones -que por cierto están siendo negociadas directamente por el presidente Miguel Guillén-. El motrileño, que estuvo cedido desde el mercado invernal de la pasada temporada en el Granada, no ha contado para el técnico madrileño en ningún momento y, tras no superar unas pruebas con el KV Mechelen belga, se enrolará en el Westerlo del mismo país durante dos temporadas con opción a otra más. El canterano dará hoy una rueda de prensa a las 13.00 horas en el estadio Benito Villamarín para despedirse de la que ha sido su casa durante muchos años y el club con el que debutó en la élite -su primer partido con el primer equipo fue ante el Anderlecht en la Champions League -.
Pero el granadino es sólo el primero de una poblada lista de jugadores que protagonizaron el penoso descenso y que probablemente saldrán del Betis antes de que se cierra el mercado de fichajes. Especialmente porque Pepe Mel no cuenta con ellos.
La salida más próxima es la de Arzu, que, tal y como adelantó El Correo , ya ha llegado a un acuerdo con el club y, tras perdonar unas cantidades a la entidad verdiblanca, está a la espera de que hoy se concrete su marcha. La opción de ir a Turquía es la que más suena como posible destino para el nazareno, que en las próximas horas rubricará unos documentos que ya están preparados.
Además, otros activos del descenso también están muy cerca de tomar la puerta de salida. Fernando Vega lleva varias semanas tratando de marcharse, e incluso tiene un principio de acuerdo con el AEK de Atenas, donde coincidiría con su paisano Manolo Jiménez, el entrenador que le dirigió en su época como canterano del Sevilla. El que más difícil lo tiene es Nelson, que sigue con la misma lesión en el tobillo con la que terminó la pasada temporada con el Osasuna. Su dolencia hace aún más complicada su venta. Precisamente los dos laterales son los únicos que continúan en el club del once titular que jugó el el 31 de mayo de 2009 el partido ante el Real Valladolid en el que se consumó el descenso tras empatar a un tanto.
Además, durante este verano también han abandonado la disciplina heliopolitana Achille Emana, con destino al Al-Hilal árabe y David Odonkor, que tras sufrir un calvario de lesiones se ha enrolado en el TuS Dornberg de la quinta división alemana.
Los supervivientes. Así las cosas, sólo tres hombres de los que vistieron la casaca verdiblanca en la 2008/09 continúan en el club y son valorados por Pepe Mel como candidatos a ocupar un puesto en el equipo. Ellos son Casto, Cañas y Juanma.
El último fue el más activo en aquel equipo que dirigieron Paco Chaparro y Josep María Nogués. El de Don Benito fue el séptimo jugador que disputó más partidos en la Liga con un total de 27. Por delante de él, precisamente, estuvieron Emana, Arzu, Fernando Vega y Nelson. Los otros dos futbolistas que jugaron más que Juanma fueron Sergio García y el central Juanito.
El guardameta, por su parte, comenzó la temporada como titular indiscutible para Chaparro, pero a partir de la jornada 17 cedió su puesto al portugués Ricardo. Pese a que llegó a estar descartado la pasada campaña, Casto se ha aferrado al equipo y, hoy día y ante la lesión de Fabricio, es el guardameta titular.
Por último, el canterano Cañas también estuvo en aquel equipo, pero su presencia fue testimonial, ya que sólo participó en las jornadas 34 y 35.
