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Lucía pincha en Eurovisión y Azerbaiyán da la sorpresa

el 15 may 2011 / 18:04 h.

El dúo Ell y Nikki, representantes de Azerbaiyán, y ganadores del Festival de Eurovisión 2011.

En la república caucásica de Azerbaiyán el Festival de Eurovisión ha logrado algo que nunca hubiera sucedido de haberse alzado ganador Reino Unido, Noruega o Francia, por citar tres poderosos países. Un vistazo a las ediciones digitales de periódicos de Baku (Today.az o Zerkalo.az) permite comprobar cómo los azerbaiyanos se lanzaron en masa a la calle en una celebración que tuvo mitad de fiesta patriotera mitad de victoria cultural.

En el imponente Düsseldorf Arena pinchó, y de qué manera, la representante de España, Lucía. Y no es que lo hiciera mal, pero su tema, Que me quiten lo bailao , parecía más digno de Club Megatrix que de un festival europeo de la canción. A su favor, que cantó en su idioma y no en el sempiterno, invasivo inglés (¿cuándo se impondrá a cada país interpretar en su lengua de origen en aras de una mayor pluralidad y riqueza musical, cultural, estilística...?), en su contra, otra vez, se abanderó la España lolailo, veraniega y aflamencada. Comprensible su hundimiento en el puesto 23 a sólo dos de cerrar la lista de las peores y únicamente ascendida por los golpecitos en el hombro de los vecinos Francia y Portugal.

Y no es que la vencedora Running scared , la canción del dúo Ell y Nikki, fuera mucho mejor. Siendo honestos no cabe buscar demasiado análisis musicológico en la lógica de las votaciones. La balada de Azerbaiyán hacía pensar en un nuevo Pimpinela. Se deja escuchar bien con los ojos cerrados antes que padeciendo una peguntosa coreografía digna de un anuncio de lencería.

Por en medio quedaron aportaciones indefendibles que, por unas razones u otras, alcanzaron puestos razonablemente dignos. Caso de Amaury Vassili quien representó a Francia con una infumable canción operística en corso con base electrónica de casa de masajes. Suiza con Anna Rossinelli y con la ridícula In love for a while dio argumentos sobrados a quienes opinan que nunca se la debió dejar salir del metro donde se ganaba la vida y Serbia con la bautizada ‘Soraya de los 60', Nina Càroban, provocó sonrojo antes que ganas de bailar.

En el lado de lo más granado, Italia, que volvía al concurso tras tres años, se arriesgó con un buen tema acústico jazzero muy bien interpretado por Raphael Gualazzi (Madness of love ). La alemana Lena -que ganó en 2010 con Satellite - regresó con muchas más tablas y un muy seductor Taken by a stranger . Pero sin duda, el hit más eurovisivo y pegadizo, Popular , lo trajo el guaperas sueco Eric Saade, quien perfectamente podía haberse alzado vencedor justificadamente. Estuvo cerca. Quedó el tercero. Será de interés saber qué ofrece en 2012 Azerbaiyán para superar el impresionante despliegue pirotécnico promovido por los productores alemanes el sábado.

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