El vicepresidente de Cajasol, Luis Navarrete, será el nuevo presidente de Isla Mágica a partir de mediados del próximo mes de abril. Según fuentes consultadas, Navarrete sustituirá a José Luis Galán en el próximo consejo de administración del parque tras la renuncia de éste.
José Luis Galán anunció que no repetiría al frente de la presidencia del parque temático en el pasado consejo de administración de la sociedad, celebrado la semana pasada, y en esa misma reunión se aprobó la incorporación de Luis Navarrete como consejero de Isla Mágica. Este nombramiento, según varias fuentes consultadas, sería el paso previo a la designación del ex presidente de la Diputación, ex secretario provincial del PSOE y ex presidente de Caja San Fernando como nuevo presidente del parque, lo que podría producirse en el consejo que se convocará a mediados de abril.
En agosto de 2004, Luis Navarrete tomó las riendas de Caja San Fernando. Actualmente es el vicepresidente de Cajasol y responsable de su obra social y cultural. Tras llegar al cargo en la caja, su objetivo fue ejecutar la fusión de Caja San Fernando y El Monte, de ahí que continuase su labor en la nueva entidad tras la unión de hace dos años.
José Luis Galán dejará el cargo, según fuentes bien informadas, porque considera que ya ha cerrado una etapa en el parque temático, que ha despejado su futuro tras el concurso abierto por la Junta para su explotación.
El pasado 3 de enero, Cajasol, Parque Isla Mágica S.A. (Pimsa) y la Consejería de Economía y Hacienda formalizaron la liquidación de las deudas del parque, el paso previo a la adjudicación definitiva, por 50 años, de la explotación del recinto de ocio a los mismos gestores de los últimos años, la caja sevillana (con un 70%) y Unicaja (12%). Cajasol pagó con una finca en Dos Hermanas valorada en 5.750.131 euros y 491.741 euros en efectivo a la Junta.
Es la segunda vez que la caja hispalense salva de los números rojos al parque, cuya rentabilidad está más que cuestionada. El primer concurso abierto por la Junta quedó desierto, de ahí que tuviera que rebajar el canon impuesto. Con todo, Isla Mágica despeja las dudas sobre su futuro y comienza ahora una nueva etapa en la que tendrá 50.000 metros cuadrados más para conseguir beneficios a través de hoteles, comercios u oficinas.
Son los nuevos usos que le concede el PGOU y la nueva fuente de ingresos. Tras garantizarse los empleos, lo que está por ver es si la apuesta de Cajasol para reflotar el parque es lo suficientemente fuerte como para afianzar el proyecto y despejar nuevas crisis.
