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Luis Oliver se despide de los béticos y anuncia medidas judiciales "drásticas"

El polémico empresario que compró las acciones del Betis a Lopera y que se mantuvo al frente de la sociedad deportiva hasta la intervención de la juez Alayaha escrito una carta de despedida a la afición:

el 24 ene 2011 / 14:16 h.

"Después del auto irrevocable de la Audiencia Provincial de Sevilla, ratificando todas las medidas cautelares -para nosotros desproporcionadas- del Juzgado de Instrucción nº 6, Bitton Sport, S.L. ha dado instrucciones a su equipo jurídico para el estudio de dicho auto y el posterior informe de las medidas a tomar con el fin de defender nuestros expoliados intereses. En breve, probablemente el miércoles o jueves de esta misma semana, se informará a todos los medios de comunicación de Sevilla de las contundentes medidas jurídicas que Bitton Sport, S.L. tomará".

"Desgraciadamente dicho auto ha puesto fin a nuestro proyecto deportivo, económico y social. El cuerpo del Real Betis Balompié (el alma seguirá siendo de todos los béticos) ha sido intervenido por la justicia. Esperemos que estas durísimas medidas no hagan más daño del que intentaban evitar. Nosotros creemos que tanto la afición como los jugadores y el cuerpo técnico necesitaban una referencia y un proyecto económico sólido a medio plazo, que desde la provisionalidad actual será imposible conseguir".

"Dar las gracias al Consejo cesado el 13 de Diciembre de 2010 por su dedicación y esfuerzo, sin más interés que el amor a unos colores. Resaltar el apoyo dado por ellos para la confección de un equipo que ha hecho historia, tanto por su arranque liguero como por sus goles a favor y su épica victoria ante el actual mejor equipo del mundo, el Futbol Club Barcelona. Hoy todos los béticos están orgullosos de su equipo y la felicidad ha vuelto a la familia verdiblanca. Dentro de muchos años y cuando la perspectiva histórica quite la acritud y vehemencia actual, se hablará con entusiasmo de las hazañas de este Betis de segunda; del cambio de nombre del estadio a Benito Villamarín; de la terminación de la ciudad deportiva Luís del Sol después de dieciocho años; del museo, un lugar sacro donde se depositan la pequeña copa (por tamaño) de la liga del 35 y las dos copas del Rey del 77 y 2005, así como los demás trofeos conseguidos por tan laureado club, que estaban por los pasillos cuando nosotros llegamos; del memorial, donde los béticos podrán tener a sus seres queridos; y de la revaloración de los fichajes hechos por este Consejo. Cuando llegamos, sólo Sergio García y Emaná eran realizables; hoy, ¿cuánto valen Beñat, Ezequiel, Salva Sevilla, Dorado, Rubén Castro, Jorge Molina, Miki, Isidoro, etc...? En definitiva, de tantos y tantos hechos que parece mentira haberlos podido realizar en tan sólo cinco meses".

"Dar las gracias a Pepe Mel, Roberto Ríos y Jesús Paredes, que han hecho una auténtica obra de ingeniería futbolística, admirada por España entera e incluso reconocida por el propio Guardiola, cuando dijo que el Real Betis Balompié había sido el mejor equipo que pasó por el Camp Nou. Gracias también a los jugadores, que después de tanta reunión para solventar los numerosos problemas anteriores a nuestra llegada, nació entre nosotros un cariño mutuo y han demostrado tanto calidad y profesionalidad futbolística como humana. A la psicóloga Patricia Ramírez, al Doctor Calero y a su equipo médico, que alegría nos dio en Salamanca. A los entrenadores de la cantera, que tanto mérito tienen; a los masajistas; a los responsables de material; a los cargos deportivos de toda índole; al personal de oficina; y a los que desde fuera han contribuido a hacer un Betis grande: Gracias, muchas gracias".

"Quiero hacer mención especial a la prensa que, pese a no darnos ni los cien días preceptivos de gracia, les estamos agradecidos, tanto a los menos críticos, porque nos dieron fuerza y aliento en los momentos difíciles, como a los críticos, que nos hicieron mejorar cada día, y a los tremendamente críticos, a los que siempre respetamos su trabajo pese a no compartir absolutamente ninguna de sus opiniones. Pero a todos muchas gracias por contribuir a que el sentimiento Betis sea conocido en el mundo entero".

"A los consejeros actuales les expresamos nuestros mejores deseos, ya que van a tener una dura e ingrata labor, y seguro que más adelante sabrán valorar el trabajo y sacrificio de sus antecesores".

"Y me dejo para el final a la mejor afición del mundo, al ALMA (sic) de las trece rayas; jamás viví en un campo de fútbol la animosidad, entrega y entusiasmo de nuestros seguidores y, aunque no seamos béticos desde chiquititos, lo vamos a ser de aquí al final de nuestra vida".

"Personalmente quiero agradecerles el solemne y respetuoso minuto de silencio que 45.000 personas guardaron por el fallecimiento de mi padre, detalle que jamás olvidaré".

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