Si con Breaking Bad ha funcionado... ¿por qué no repetirlo? Esto deben haber pensado los directivos de la cadena AMC que ha decidido retrasar el final de Mad Men hasta el 2015 y dividir la séptima y última temporada en dos partes siguiendo así la misma estructura que la exitosa serie creada por Vince Gilligan. La AMC parece haber encontrado, gracias a Walter White y los suyos, la fórmula del éxito. Y es que, una vez más, la cadena estadounidense ha decidido dividir la temporada de una de sus series en dos partes. Con Breaking Bad dio resultado, ya que la ficción ha conseguido en esta última tanda de capítulos superar, en dos ocasiones, sus propios récords de audiencia. También The Walking Dead seguirá la misma fórmula con la próxima temporada, que estará divida en dos partes de 8 capítulos cada una. Ahora le llega el turno a la aclamada Mad Men. La ficción creada por Matthew Weiner, que tenía previsto acabar el próximo año, ha retrasado su final hasta el 2015. Y es que la AMC ha decidido emitir la última tanda de capítulos divida en dos partes de siete capítulos cada una. La primera parte será emitida en la primavera del 2014 y llevará por título The Beginning (El principio). La segunda y última tanda de capítulos llegará un año más tarde, en la primavera del 2015, y se titulará The End of an Era (El final de una era). "Este enfoque ha funcionado bien para muchas series en múltiples canales y, más recientemente, para nosotros con Breaking Bad, que atrajo a casi el doble de número de espectadores en esta segunda tanda de capítulos", reconoce el presidente de la AMC Charlie Collier. De esta manera, el creador de Mad Men ha asegurado que con esta estructura aprovechará para "tener una historia más elaborada contada en dos partes".