La nieve que ha caído en Madrid este jueves ha sido la esperada por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), que preveía que podrían acumularse hasta 2 litros por metro cuadrado de precipitación y hasta 2 centímetros de espesor de nieve y que la situación mejoraría "rápidamente".
Sin embargo, según ha explicado el portavoz de la AEMET a Europa Press "no es habitual" que nieve en noviembre en Madrid y, de hecho, en el observatorio de Madrid-Retiro ha registrado desde 1950 seis días de nieve en cinco años durante este mes. "Es un fenómeno raro, pero no desconocido y suelen ser como las de este jueves, precipitaciones de tipo débil sin más consecuencias", ha señalado.
En este sentido, ha añadido que la nieve en Madrid es habitual, pero no en noviembre y que los meses más habituales de nevadas en la capital son diciembre, enero y febrero, con una media anual de 4 días de nieve al año. Frente al observatorio de Madrid Retiro, por ejemplo en San Lorenzo del Escorial ha nevado 82 días de noviembre desde 1950, una cifra que se eleva hasta las 522 jornadas de nieve en estos 63 años.
Además, ha apuntado que este jueves se esperan algunas precipitaciones en la zona centro y centro sur de la Península y que la cota de nieve irá subiendo en Castilla-La Mancha, al tiempo que las precipitaciones irán desapareciendo a lo largo de la mañana.
Asimismo, se prevén precipitaciones en el sur y sureste de Andalucía, en el área del Estrecho y durante la primera mitad del día en las islas más occidentales de Canarias. La tendencia, según Elizaga es que vayan remitiendo las precipitaciones en todas las zonas menos en el Estrecho, donde podrían remitir a lo largo del día. En cuanto a las temperaturas, ha dicho que las diurnas bajarán ligeramente en el sur y subirán en el nordeste.
De cara al viernes, el portavoz de la AEMET espera que predominen los cielos poco nubosos en general y algunas precipitaciones en el área del Estrecho y Melilla, aunque tenderán a desaparecer. Al final del día se incrementará la nubosidad por el norte y podrían subir débilmente las temperaturas.
Así, ha precisado que las temperaturas máximas subirán y que las mínimas descenderán en el sureste peninsular. En todo caso, se mantendrán este viernes las heladas generalizadas en gran parte del interior peninsular, con termómetros que estarán por debajo de -6 y -8 grados centígrados en muchos puntos del país.
De cara al fin de semana se espera que sigan las heladas, aunque disminuirán de intensidad y se reducirá la zona afectada. Las precipitaciones volverán el sábado al tercio norte peninsular y podrían ser persistentes en el Cantábrico oriental, Pirineos, puntos del sistema ibérico y central y la cota de nieve podría caer hasta los 600 metros de altura en el extremo norte y a 1.100 metros en Baleares.
Las temperaturas diurnas bajarán el sábado mientras las nocturnas subirán de manera notable en la mitad norte peninsular y, sobre todo en el tercio norte, a consecuencia de la nubosidad, es decir que "habrá heladas pero menos intensas".
En cuanto a datos concretos, Elizaga ha precisado que en la madrugada de este jueves los termómetros han llegado hasta -12,4 grados centígrados en Molina de Aragón; -10,2 grados centígrados en Sartaguda (Navarra), que está a 310 metros de altura; -10,1 grados centígrados en Martinet (Lérida); -9,4 grados centígrados en Roncesvalles (Navarra).
Al mismo tiempo, ha dicho que en muchos puntos del interior situados a una altura de unos 1.000 metros, se han registrado valores como los -8,7 grados centígrados de La Pobeda(Soria) y Navasfrías (Salamanca); -8,6 grados centígrados en Palacio de la Sierra; -8,5 grados centígrados en Ucero (Soria); -7,8 grados centígrados en Soria; -6 grados centígrados en Ávila; -5 grados centígrados en Teruel, Segovia y Pamplona y -4 grados centígrados en Burgos.
