Antonio Maíllo (izquierda), ayer en Linares, junto a Alberto Garzón (derecha). / El Correo
El candidato de IU a la Presidencia de la Junta, Antonio Maíllo, está recibiendo casi el mismo apoyo de sus líderes nacionales en esta campaña que su rival popular. Ayer volvió a contar con la presencia del coordinador general, Cayo Lara, en Málaga, y del candidato de IU a la Presidencia del Gobierno central, Alberto Garzón, que participó con él en un acto en Linares (Jaén).
Con más encuestas sobre la mesa que insisten en que tras el 22M habrá que pactar y que IU partirá en la negociación con menos representación de la que tuvo en 2012, Garzón afirmó que «la única hipótesis» que baraja es que Maíllo presida el Gobierno andaluz para «transformar Andalucía». Una transformación que solo puede hacerse «desde los principios y los valores de izquierdas», tras insistir en que «las excusas» de la presidenta de la Junta, Susana Díaz, para romper el pacto de gobierno apelando a la inestabilidad «no se las cree absolutamente nadie» y apuntar a que detrás está «su miedo a denunciar la corrupción, que ha sido siempre un pilar fundamental de IU» y su propio interés político.
Precisamente Maíllo lanzó un avisó a la candidata socialista: «Se le va a volver en contra» el adelanto electoral. Y es que, pese a que las encuestas vaticinan que IU será la gran damnificada de fuerzas emergentes como Podemos e incluso Ciudadanos, Maíllo desdeña los sondeos porque quiere «hablar de los problemas que asisten a los ciudadanos». No obstante asegura que el 22M «va a dar una sorpresa como la dio hace tres años». Y es que tras el debate electoral del pasado lunes en Canal Sur, asegura que ha habido un «punto de inflexión» y nota «un apoyo creciente» porque demostró «tener propuestas para el día siguiente» de las elecciones y para «desarrollar un modelo desde posturas radicalmente democráticas y de transformación social y económica».
