La coalición política del primer ministro iraquí, Nuri al Maliki logró una gran victoria en las elecciones provinciales del pasado 31 de enero, según los resultados preliminares que se dieron a conocer el jueves.
El grupo de Al Maliki, la Coalición para el Estado de Derecho, obtuvo el primer lugar en 9 de las 14 provincias iraquíes en las que se votó, un resultado que confirma las previsiones que existían antes de la votación. Estos comicios han sido los primeros desde el 2005 y eran claves para lograr la estabilidad política en Irak, un país que sufre un conflicto armado desde la invasión militar encabezada por Estados Unidos en 2003.
El resultado fue anunciado en rueda de prensa por responsables de la Comisión Electoral Independiente, que facilitó los datos de cada provincia, sin dar un resultado total a nivel nacional. El escrutinio corresponde al 90% de las mesas de votación. No obstante, los datos tienen aún que pasar la revisión oficial, a partir de las impugnaciones que puedan presentar los diferentes grupos políticos, un proceso que se espera quede completado dentro de este mes.
En segundo lugar quedó el grupo Shahid al Mihrab, dependiente de la Alianza Suprema Islámica de Irak, del clérigo Abdelaziz al Hakim. A pesar de que Al Hakim y Al Maliki forman parte de la actual alianza gubernamental, decidieron acudir a los comicios por separado.
Sólo en la provincia de Bagdad, que incluye la capital iraquí, la coalición de Al Maliki obtuvo el 38% de los sufragios. Un resultado parecido, el 37% de los votos, obtuvo la coalición del primer ministro en la provincia meridional de Basora, cuya capital, del mismo nombre, es la segunda ciudad del país.
En los comicios se eligieron las autoridades locales de 14 de las 18 provincias del país. No hubo votación en las tres provincias autónomas del Kurdistán iraquí y tampoco en la provincia multiétnica de Kirkuk, que tiene un estatus especial.
Los resultados logrados por Al Maliki le permiten colocarse en una posición política predominante con vistas a las elecciones generales, programadas para finales de este año. Al Maliki, un dirigente político chií que se presentó a los comicios defendiendo posiciones laicas, accedió a la jefatura del Gobierno el 20 de mayo del 2006 y desde entonces se ha convertido en la figura con mayor futuro político en el país.
En la provincia de Nínive, actualmente la más castigada por la violencia, la victoria fue para los grupos políticos suníes. Tras conocer su victoria electoral, Al Maliki, explicó en su comparecencia pública que su coalición política está dispuesta a integrar alianzas para la formación de los consejos provinciales elegidos en los comicios celebrados el pasado sábado. Este anuncio lo hizo tras reunirse con el máximo líder religioso de la comunidad chií iraquí, el Gran Ayatolá Mohamed Sistani, en la ciudad santa chií de Nayaf, al sur de Bagdad. "El principio de formar alianzas y la colaboración están presentes, así como el reparto de los puestos será fundamental para nosotros, porque en eso creemos y es por lo que trabajamos", recalcó Maliki.
