Todas las plazas de toros en las que el 1 de agosto ha habido programación taurina han abierto sus respectivos festejos con la lectura de un manifiesto a favor de la fiesta de los toros, redactado de forma conjunta por todos los profesionales del toreo.
El momento de su lectura ha sido una vez finalizado el paseíllo y antes de romper filas las cuadrillas.
Con este manifiesto, los profesionales del toreo han querido, primero, "solidarizarse con los aficionados catalanes", y segundo, "pidiendo la libertad para todos a los que les gusten los toros a ir a las corridas"
También han querido hacer un llamamiento al "respeto no sólo al aficionado sino también al profesional, al que trabaja y vive de los toros" pues son muchos "los que se ganan el pan con esta profesión, y se está coartando un derecho tan importante como es el de ejercer un trabajo".
El manifiesto concluyó con el lema "¡Viva la fiesta de los toros!".
El 1 de agosto se celebró en Barcelona la primera corrida de toros después de que el miércoles el Parlamento Catalán las prohibiera en toda la comunidad a partir de 2012.