Manolo Jiménez no pudo dirigir al Zaragoza desde el césped del Sánchez-Pizjuán. Lo hizo, al estar sancionado, desde un palco privado en compañía de uno de sus colaboradores. El regreso del técnico de Arahal a la que ha sido su casa toda la vida era esperado y, entre otras cosas, deparó una curiosa imagen captada por las cámaras de Cuatro.
En ellas se observa a Jiménez tarareando por momentos el Himno del Centenario mientras lo escuchaba por la megafonía del estadio. En su regreso a Nervión, el extécnico del Sevilla fue recibido con respeto por parte de una afición que coreó su nombre.