Manzano manifestó en conferencia de prensa que su equipo tuvo un inicio de partido "bastante bueno", aunque matizó que el Sevilla "jugó mejor contra once jugadores que contra diez", por lo que no consideró determinante la expulsión del turco Mehmet Topal en el minuto 25.
Manzano añadió que a partir de ese momento a su equipo "le entraron las prisas y la ansiedad", por lo que comenzó a "perder posiciones" y la superioridad numérica "no se manifestaba en el campo".
Además, el decisivo cambio de Álvaro Negredo por Romaric tras la reanudación sirvió para "fijar más a la defensa del Valencia", ya que el malí Frederick Kanouté "apoyaba en el centro del campo" y el brasileño Renato "daba el equilibrio necesario".
De esta manera, la apuesta "salió bien", ya que Negredo "marcó nada más entrar y el partido se puso más fácil", aunque el Valencia "se replegaba bien y tenía contragolpes rápidos", por lo que el Sevilla "ha sacado un partido difícil con relativa superioridad", ha concluido.