El seleccionador de Argentina Diego Maradona aseguró que no se arrepiente de los insultos que profirió contra un sector de la prensa de su país después de clasificar al equipo al Mundial de Sudáfrica 2010.
Maradona, en una entrevista con el Canal 7 nacional, explicó que reaccionó con palabras soeces con algunos periodistas que lo criticaron con "mala leche", acusándolo de no trabajar y no estar preparado para ser el técnico argentino.
"Les pedí disculpas a las damas, no a los que hablan de fútbol en televisión. Fue un desahogo, pero no me arrepiento. Después, cuando nos clasificamos y dije lo que dije, están todos ofendidos. Lo dije en horario de protección al menor", destacó.
"A la Tota (su mamá) en el día de la madre le di un beso en la frente y le dije: 'si me equivoqué te pido perdón a vos, pero a nadie más'", añadió.
Además, considera que si se hubieran quedado fuera del Mundial se tendría que haber ido "a vivir a Haití": "El primer fusilado en el paredón iba a ser Diego Armando Maradona".
Por otra parte, explicó que se abrazó con Bilardo tras lograr la clasificación porque en su caso "el técnico sobrepasa al manager" y que no fue porque el entrenador influya en su táctica. "No hay ninguna mano de Bilardo, tiene que estar con el presidente Grondona (en el palco) de saco y corbata. Con el equipo tenemos que estar nosotros tres", señaló, en referencia a sus ayudantes.
VA A HABLAR CON VERON, MASCHERANO, HEINZE Y MESSI.
El 'Pelusa' explicó los motivos de los múltiples cambios de jugadores que realizó desde que asumió la dirección de la selección de fútbol de Argentina, en noviembre del 2008. "Teníamos un grupo, pero algunos se quedaron fuera por bajo rendimiento y otros por indisciplina. Llegamos a estos partidos con muchos jugadores del fútbol local que nos clasificaron. Sabía que tenía mi revancha, y, por eso ahora que estoy en el Mundial, les digo 'se equivocaron muchachos'", dijo Maradona.
Finalmente, el técnico adelantó que en los próximos días tendrá conversaciones con jugadores referentes de su selección como Verón, Mascherano, Heinze y Messi. "Después, tendré una charla con Grondona y nos enfocaremos en el Mundial", expresó.
"Cada jugador tendrá que demostrarme a mí y al cuerpo técnico que puede bancarse (soportar) un Mundial, que no es fácil. Hay que bancarse la convivencia, las lesiones. Hay que armar un buen grupo, que se ayuden entre todos", concluyó.
