Marcelino García Toral ha puesto de manifiesto que su relación con algún que otro futbolista del plantel no era precisamente buena mientras estuvo al frente del mismo. "Con uno o dos jugadores no me iría a tomar un café", ha declarado en Radio Sevilla, si bien añadió que para él "eso es irrelevante". "Yo me quedo con la actitud que tuvieron con nuestras decisiones, y en eso no puedo reprochar absolutamente nada", explica. No dio nombres.
El asturiano sí ofreció alguna idea más sobre lo que piensa después de su paso por el banquillo nervionense. Así, preguntado por el papel de "los referentes" de la plantilla, respondía: "Eso de referentes... habrá que demostrarlo". Breve pero clarito.
Marcelino reconoce que se siente frustrado "por no haber logrado que el Sevilla funcionara como equipo", aunque valora la calidad de los jugadores. "Todos serían titulares en cualquier equipo menos en el Madrid y en el Barcelona, aunque si ninguno de los entrenadores, con diferentes formas de ser y metodologías, lo logramos, puede ser que a la plantilla le haga falta un perfil diferente de jugador".
Marcelino también ha hablado de algunos nombres propios, como por ejemplo José Antonio Reyes. "Conmigo tuvo un rendimiento muy bueno. La pena es que se lesionó ante el Málaga y que ante el Villarreal lo utilizamos en condiciones de emergencia", explica.
Respecto a Babá, Marcelino comentó que "ha venido a una competición más exigente y al principio no es fácil". "Es un jugador de futuro y habrá que darle tiempo", añadía.
Por último, preguntado por el partido entre dos de sus exequipos, dice que "si hay un favorito, ése es el Sevilla". "El Racing está teniendo muchos problemas. Además, para un equipo que lo está pasando tan mal, disputar dos encuentros en sólo 48 horas es muy duro", sostiene.
