El nuevo proyecto del Sevilla no termina de arrancar. Cinco jornadas consecutivas sin ganar, de las cuales dos se saldaron con derrota en casa, y, sobre todo, la sensación de que el equipo no da el nivel esperado y exigible para cualquier aspirante a una plaza en la Liga de Campeones han provocado que las aguas bajen revueltas por Nervión. Marcelino García Toral sigue creyendo en su trabajo, aunque reconoce que no pensaba ver a su equipo a estas alturas como lo está viendo todo el mundo: mal.
Lo único positivo es que, pese a sumar sólo tres puntos de los últimos quince en juego, la diferencia respecto al cuarto clasificado -entre otras cosas porque queda mucho campeonato- es asequible y, además, el Sevilla sigue en puestos europeos. Con todo, urge mejorar, tanto a nivel ofensivo -es, con diferencia, el equipo menos goleador de los seis primeros clasificados- como defensivo. Aunque el equipo encaja menos tantos que el pasado año, cede demasiadas ocasiones de gol claras; ante rivales fuertes y ante rivales de inferior potencial, que es lo llamativo.
Marcelino ha hecho un análisis de la situación en el día después de la derrota frente al Athletic de Marcelo Bielsa. Y ha sido bastante claro. Una de sus frases resume la sensación que tiene en estos momentos: "Estamos peor de lo esperado por estas fechas, en puntos y en juego". "Es una evidencia, no podemos poner paños calientes", explicaba en Cope Sevilla.
El técnico reconoce que se ha producido un importante bajón en el rendimiento, aunque deja claro que existe un patrón de juego. "Estamos a mitad de camino de casi todas las cosas. Después del partido de Barcelona hemos sido muy irregulares, y yo soy parte responsable. No he dado con la tecla para que seamos sólidos, competitivos y ganadores. Pero sí que tenemos un patrón de juego. No se puede decir que no juguemos a nada, aunque el sello no está cerrado", indica.
¿Por qué el Sevilla no presiona arriba y cede tanto terreno al rival? Su respuesta a esta pregunta generalizada es la siguiente: "No es cierto que renunciemos al juego combinativo. Lo que no tenemos son futbolistas para presionar de forma continuada en campo contrario; no tenemos los mimbres. Podemos hacerlo, pero no de forma continuada. El Madrid fue a Valencia y no presionó arriba".
Dentro de su análisis, expuso los motivos que, a su juicio, motivaron la derrota este pasado domingo. "El rival fue superior. No fuimos suficientemente intensos. Nos crearon superioridad, tuvimos problemas en la recuperación en zona de banda y, además, nos duraba el balón dos segundos", dice.
UN DELANTERO SÍ O SÍ. El asturiano también se ha referido a la profundidad del plantel. Reitera la necesidad de reforzar el ataque en invierno, y lo hace con otra frase tan clara como repetida: "Es necesario un delantero". En este sentido, vuelve a justificar la razón por la cual no se fichó antes de empezar la temporada: "Pensábamos que Giovani era el más indicado, pero el mercado no era propicio y luego valoramos que sin estar en Europa teníamos suficiente potencial en ese puesto". En cualquier caso, Marcelino está convencido de que "el Sevilla tiene una plantilla para luchar por el tercer puesto". "Se nos debe exigir", dice.
También ha hablado de los problemas en el centro del campo, tanto a nivel creativo como defensivo. Rakitic, según él, no está al nivel deseado por cuestiones "físicas", consecuencia del tiempo que ha estado lesionado. En ese sentido, explica con la sanción de Medel no tenía más jugadores del perfil del chileño. "Era lógico que Zokora saliera. Fazio es centrocampista para un momento determinado, pero ni Trochowski ni Campaña ni Rakitic pueden jugar como mediocentros defensivos", afirma.