El renovado Sevilla FC 2013-14 inició su serial de amistosos de la pretemporada con una victoria (1-4) en el estadio Bahía Sur ante el San Fernando, en partido que sirvió para homenajear a Antoñito, que puso fin a su carrera como futbolista profesional al finalizar la pasada temporada. El que fuera delantero sevillista, formado en la cantera del club, jugó en la primera parte con el San Fernando, el último club de su carrera, y en los prolegómenos recibió una escultura de manos del presidente del Sevilla FC, José María Del Nido, que estuvo acompañado por el subdirector general deportivo, Ramón Rodríguez Verdejo, Monchi.
Pese a las impresiones típicas de estos partidos de pretemporada, en los que los futbolistas acusan el cansancio del trabajo físico de estas semanas, y en los que Unai Emery aprovechó para realizar muchas probaturas, se pudo constatar la calidad de jugadores como el alemán Marko Marin, uno de los siete fichajes del Sevilla. El exjugador del Chelsea anotó dos goles y se le vio mucha calidad y criterio en sus acciones. También destacó José Antonio Reyes, muy activo y arrancando desde la banda derecha, la posición en la que tanto el utrerano como Emery han anunciado que puede ser la habitual en la próxima temporada, tras la salida de Jesús Navas.
Carrión adelantó a los locales tras un desajuste entre Nico Pareja y el portero Julián. El primer once de Emery fue: Julián, Modesto, Fazio, Pareja, Navarro, Reyes, Guarente, Maduro, Moisés, Cotán y Rusescu. Reyes igualó la contienda antes del descanso tras robar un balón. En la segunda mitad, el técnico probó con Julián, Coke, Cala, Carriço, Alberto Moreno, Reyes, Medel, Rakitic, Víctor Machín, Marin y Rusescu.
Así, Carriço debutaba pocas horas después de firmar su contrato. Fue un periodo en el que también tuvo presencia Víctor Machín pero sobre todo, de nuevo, Marko Marin.
