La windsurfista sevillana Marina Alabau, plata en el Mundial de Vela de Santander. Foto: EFE.
La sevillana Marina Alabau, que ha logrado la medalla de plata para España en el Mundial Santander 2014, declaró que "acabar segunda ha sido mucho más de lo que esperaba".
"Físicamente no estoy en mi mejor momento, todavía tengo mucho que mejorar y sabía que si quedaba entre las cinco primeras era ya lograr un objetivo bastante grande", opinó.
A sus 29 años, la campeona olímpica en Londres 2012 y oro en el Mundial 2009, volvió a la alta competición el pasado mes de enero, tres meses después de dar a luz a su primera hija, Marta.
"Me he sentido súper bien desde esta mañana; sabía que podía hacerlo y lo he logrado.Tengo mucha más experiencia que las otras chicas en lo que es pelearme por una medalla y eso ha jugado en mi favor. En ningún momento he estado nerviosa", reconoció
"He sabido en todo momento lo que hacer, cómo controlar a la flota, hubo un momento en que la inglesa sí que me podía haber ganado, pero tuvo un error en la boya barlovento y estuve con un ojo en la israelita", relató.
"Hemos clasificado al país (para los Juegos de Río) pero todavía no ha empezado la selección entre Blanca Manchón y yo que, ya que empezará el año que viene. Tengo buenas muy buenas sensaciones ya que esta temporada la había tomado como de recuperación después de haber tenido a la niña", señaló.
"No podía esperar nada mejor esta temporada y en cuanto a Blanca he visto que no lo ha estado haciendo tan bien como suele, pero el año que viene es el importante y sé que será mi gran rival", admitió.
En Santander está en todo momento con su marido y entrenador Álex Gudayer. "Mi hija está en casa, en Tarifa con la abuela y yo sólo tengo ganas de llegar a casa y darle un abracito a mi niña. Ella no se entera de nada, ni siquiera de que su madre se ha ido de casa".
El camino hasta esta medalla de plata no ha sido fácil. "Este invierno estuve entrenando en Gran Canaria y el comienzo fue muy duro porque en el embarazo no hice lo más mínimo de trabajo físico, ni me preocupé. Al empezar los entrenamientos sufría mucho, no conseguía navegar más de una hora porque acababa muerta. Ha sido bastante duro, pero ha merecido la pena", concluyó.
La windsurfista sevillana Marina Alabau, plata en el Mundial de Vela de Santander. Foto: EFE.
La sevillana Marina Alabau, que ha logrado la medalla de plata para España en el Mundial Santander 2014, declaró que "acabar segunda ha sido mucho más de lo que esperaba".
"Físicamente no estoy en mi mejor momento, todavía tengo mucho que mejorar y sabía que si quedaba entre las cinco primeras era ya lograr un objetivo bastante grande", opinó.
A sus 29 años, la campeona olímpica en Londres 2012 y oro en el Mundial 2009, volvió a la alta competición el pasado mes de enero, tres meses después de dar a luz a su primera hija, Marta.
"Me he sentido súper bien desde esta mañana; sabía que podía hacerlo y lo he logrado.Tengo mucha más experiencia que las otras chicas en lo que es pelearme por una medalla y eso ha jugado en mi favor. En ningún momento he estado nerviosa", reconoció
"He sabido en todo momento lo que hacer, cómo controlar a la flota, hubo un momento en que la inglesa sí que me podía haber ganado, pero tuvo un error en la boya barlovento y estuve con un ojo en la israelita", relató.
"Hemos clasificado al país (para los Juegos de Río) pero todavía no ha empezado la selección entre Blanca Manchón y yo que, ya que empezará el año que viene. Tengo buenas muy buenas sensaciones ya que esta temporada la había tomado como de recuperación después de haber tenido a la niña", señaló.
"No podía esperar nada mejor esta temporada y en cuanto a Blanca he visto que no lo ha estado haciendo tan bien como suele, pero el año que viene es el importante y sé que será mi gran rival", admitió.
En Santander está en todo momento con su marido y entrenador Álex Gudayer. "Mi hija está en casa, en Tarifa con la abuela y yo sólo tengo ganas de llegar a casa y darle un abracito a mi niña. Ella no se entera de nada, ni siquiera de que su madre se ha ido de casa".
El camino hasta esta medalla de plata no ha sido fácil. "Este invierno estuve entrenando en Gran Canaria y el comienzo fue muy duro porque en el embarazo no hice lo más mínimo de trabajo físico, ni me preocupé. Al empezar los entrenamientos sufría mucho, no conseguía navegar más de una hora porque acababa muerta. Ha sido bastante duro, pero ha merecido la pena", concluyó.
