La Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) retiró ayer a Viajes Marsans la licencia para la venta de billetes de avión y exigió un aval de 20 millones de euros, confirmaron fuentes del grupo turístico español. Para los propietarios de la compañía, Gerardo Díaz Ferrán, presidente de la CEOE, y Gonzalo Pascual, tal decisión es "un atropello", ya que desde que existe esa asociación internacional, Marsans "siempre ha pagado puntualmente".
Según la misma fuente, Amadeus España, siguiendo las instrucciones de la IATA, inhabilitó ayer por la tarde a las agencias del grupo Marsans la posibilidad de emisión de billetes de la IATA disponibles a través de este GPS. Las agencias son: Viajes Marsans, Rural Tours Viajes, Viajes Atenea, Tiempo Libre, Viajes Crisol y Viajes Marsans Lusitana (Portugal).
Los abogados del grupo preparan una reclamación "multimillonaria" contra la IATA si no rectifica hoy, porque consideran que, con esta medida, se daña la imagen de una empresa con un siglo de historia.
El propio Gonzalo Pascual señaló que "no hay otra solución" que responder con esa cantidad que exige la IATA, lo que confió en resolver "en estos días".
Calificó la decisión de la IATA de "injusta" sin un plazo para impugnarla y vio en ello "un mano detrás". "No se puede tomar una decisión de esa envergadura sin otorgar un plazo", insistió.
El empresario, que reconoció que Marsans había recibido varias comunicaciones por parte de la IATA como advertencia, indicó que "ni en lo más remoto" podía imaginarse que la situación llegara hasta este punto.
Para la compañía, la decisión de la IATA es un despropósito y, si la organización mantiene su decisión de cortarle el servicio, buscará soluciones a través de otras agencias "colegas" para poder seguir operando y atendiendo a sus clientes. A las 20.20 horas de ayer, la web de Marsans estaba fuera de servicio, "por tareas de mantenimiento y mejora en los sistemas".
Gonzalo Pascual asumió recientemente el mando del grupo turístico, que está en venta, tras los ceses del director general y de varios consejeros delegados.
Un calvario. Los problemas de Marsans aparecen en verano de 2009, pero hay que remontarse a 2006 para percibir la primera liquidación de una de las empresas del grupo. Fue la compañía de cruceros Pullmantur, adquirida por Royal Caribbean.
En 2007 y 2008 aflora el conflicto con Aerolíneas Argentinas, que acabó con la expropiación de esta empresa por parte del Gobierno de Argentina y un pleito en un tribunal de intermediación que aún no se ha solucionado. A ello se sumó también la venta a SAS del 5,6% del capital que poseían Díaz Ferrán y Pascual en Spanair y su intento de adquirir toda la compañía. Sin embargo, esta operación fracasó.
A partir de junio los conflictos en la aerolínea Air Comet aumentaron por la falta de liquidez e impago a los trabajadores de la compañía, lo que conllevó que el 21 de diciembre cerrasen las operaciones de la misma tras un embargo judicial de aviones. Miles de pasajeros se quedaron en tierra. Hace sólo una semana, el Ministerio de Economía disolvió la aseguradora Mercurio debido a su grave situación patrimonial.
En venta. La venta de Viajes Marsans está "muy próxima" a materializarse, según fuentes conocedoras de las negociaciones, que hablan de tres ofertas de compra, dos de ellas de fondos de inversión europeos.
Mientras, el grupo Batallajuanola, representante del fondo luxemburgués Real Estate Distressed Fund, retiró ayer su oferta de compra de la compañía Air Comet. La decisión se tomó tras la deuda anunciada en el concurso de acreedores. El grupo había supeditado la oferta al estado de sus cuentas, por lo que su intención era comprobar en la auditoría cuál era su realidad financiera.
