Tanto la Fiscalía como la familia de Marta, que ejerce la acusación particular, mantuvieron los seis años de internamiento y tres de libertad vigilada por el asesinato y la doble violación de la joven. La defensa pidió la libre absolución porque cree que "no hay pruebas". Sin embargo, el Ministerio Público introdujo un elemento nuevo en su calificación que es el delito de encubrimiento, para que en caso de que el juez considere que "no hay pruebas suficientes de la directa participación del menor en todos los hechos, garantizar todas las posibilidades de condena". Por este delito reclama, "como alternativa", tres años de internamiento.
Sin embargo, la sentencia ha quedado en suspenso, ya que antes de dictarla, el juez tendrá que resolver la cuestión de inconstitucionalidad que planteó la familia con el objetivo de que no se celebren dos juicios por los mismos hechos. Las partes tienen diez días hábiles para pronunciarse, tras lo que el juez tendrá otros tres días para resolver. Si lo rechaza podrá dictar la sentencia, pero si lo admite ésta quedará aún en suspenso hasta que el Tribunal Constitucional resuelva la cuestión. Esto provocaría que el proceso se dilate, ya que el TC puede tardar más de un año en tomar una decisión. Además, si ésta es favorable, implicaría que el juicio al menor se declararía nulo. Si lo desestima, el juez de Menores ya tendría vía libre para poner la sentencia. La Fiscalía ya se opuso a esta cuestión y el abogado del menor, Fernando de Pablo, dijo ayer que "seguramente nos opongamos".
La Fiscalía se ha apoyado en la declaración en la que el asesino confeso de Marta, Miguel Carcaño, reconoció que él y el Cuco la violaron y mataron. Según fuentes del Ministerio Público, esta versión es "sumamente creíble" porque supuso "reconocer unos hechos de muchísima más gravedad que los que hasta el momento se le imputaba", que era el homicidio. Además, recuerda que tras confesar la violación Miguel intentó suicidarse y vuelve a reiterar en una carta su testimonio. Pero para la fiscal lo fundamental es "la minuciosidad de los detalles" y el hecho de que las pruebas recabadas por la Policía "van encajando" con el relato.
Así, en su informe, la Fiscalía recordó que en el dormitorio de Carcaño se localizaron perfiles genéticos del Cuco mezclados con los de Marta, justo en el lugar que Miguel dijo que fue estrangulada. Además, también se localiza ADN de Miguel y de la chica y una huella del menor en una botella de ron, lo que "coincide con el desarrollo narrado de los hechos". Asimismo, destaca que entre las 19.35 y las 23.26 horas el menor no puede ser posicionado porque no recibe ninguna llamada, una franja en la que tampoco se puede localizar al resto de imputados. A esto, añade el hecho de que se encontrara en una alcantarilla de León XIII la navaja que Miguel dijo que usaron para amedrentarla. También destaca que el padre del menor se acogiese a su derecho a no declarar, en lugar de darle una coartada, pues "es sabedor de que incurría en un delito de falso testimonio".
Por todo ello, consideran al Cuco autor de un delito de asesinato, dos de violación y uno contra la integridad moral, por el daño causado a los padres al no revelar el paradero del cuerpo. A este respecto, la Fiscalía señaló que los implicados no quieren que aparezca para que no se le pueda hacer la autopsia, ya que ésta "corroboraría de manera indubitada científicamente la forma en que murió". La Fiscalía también mantuvo la petición de 616.000 euros por los gastos ocasionados con las diferentes búsquedas del cuerpo.
La abogada que representa a la familia de Marta del Castillo, Inmaculada Torres, también solicitó la máxima pena para el menor, aunque en este caso por los delitos de asesinato, violación y profanación del cadáver. La letrada defendió ayer que el menor violó a Marta y que fue el autor material del asesinato, pues fue quien cogió el cable para asfixiarla mientras Miguel la sujetaba. Torres estimó la hora del crimen sobre las 20.30 y las 21.00 horas, aunque la sacaron del piso sobre las 2.00 o las 2.30 horas, ya que son las horas en las que todos no están localizados. Para ello usaron una silla de ruedas.
Según la abogada, el menor y Miguel "bebieron y fumaron porros". Luego "Miguel intentó besar a Marta, pero ella se negó. El Cuco quiso hacer lo mismo, porque estaba obsesionado con ella". Los dos la violaron y luego la ataron para estrangularla. El menor llamó a Samuel desde una cabina para quedar con él a las 2.30 horas en su casa. Allí cogieron el coche de la madre del Cuco, "donde se encontró una mancha de sangre, que no se ha podido determinar si era de Marta". Este resto fue localizado por la Policía en la puerta trasera izquierda, lo que "concuerda con la primera declaración de Miguel que reconoció que sacaron el cuerpo por esta puerta".