Hacer los deberes. El nuevo delegado del Martes, Francisco Javier Gómez, no ha perdido el tiempo. En su primera Semana Santa en el cargo, y después de recoger las inquietudes de cada una de las hermandades, ha planteado una propuesta de reorganización del día que, de un plumazo, acaba con los dos graves problemas que arrastra la jornada: el colapso de cofradías por la Alfalfa y el rodeo que se ve obligada a dar Santa Cruz para llegar a la Campana.
Una a cada lado. El plan Gómez -que le avanzamos aquí- pasa por una reorganización de la nómina encaminada a que, al salir de la Catedral, las cofradías vayan alternando sus recorridos de regreso a derecha e izquierda. El Cerro (a derecha) y Los Javieres (a izquierda) mantendrían inalterables sus puestos abriendo la jornada. La tercera cofradía del día sería La Candelaria (a derecha) -que permutaría su sexto puesto actual con San Esteban-, mientras que la cuarta pasaría a ser San Benito (a izquierda), cambiando así su posición con Los Estudiantes (a derecha), convertida en la quinta cofradía de la nómina (saldría una hora y cuarto más tarde de la Catedral y se evitaría el cruce con Santa Cruz). San Esteban (a izquierda) saltaría del tercer puesto al sexto, cerrando la nómina el Dulce Nombre y Santa Cruz.
El obstáculo: San Esteban. La propuesta, planteada a los hermanos mayores, ha gozado de una buena acogida, si bien desde el comisionado de San Esteban se invoca el argumento de la "anómala situación" por la que atraviesa la hermandad para no emprender grandes reajustes. El delegado de día cree, sin embargo, que la reorganización también beneficia a los de la Puerta Carmona, que regresarían a casa sobre las 01.30 horas sin el aliento de San Benito en el cogote. Y todo ello sin cambiar su recorrido. La propuesta ya está sobre la mesa y serán las hermandades las que deban decidir.
Los Gitanos. La historia se repite en la cofradía de la Madrugá. El cabildo general del pasado lunes aprobó las cuentas de 2008 por un exiguo margen de 93 votos a favor, 91 en contra y dos votos en blanco. Como quiera que las Reglas preceptúan que los acuerdos de cabildo general deben adoptarse por mayoría absoluta (la mitad más uno de los votos emitidos), un grupo de hermanos tiene la intención de impugnar el cabildo.
A paso de mudá. Uno: "No veas el enorme malestar que ha causado en la junta superior el escaso tacto demostrado por el servicio de protocolo del Arzobispado en el acto de toma de posesión de Asenjo. Aparte de no invitar a los hermanos mayores, a la hora de seleccionar a los representantes que saludaron al nuevo obispo confundieron a un órgano meramente consultivo con uno verdaderamente representativo. Tú ya me entiendes. Hay mosqueo, mucho mosqueo en San Gregorio. Tanto que el Consejo se está pensando su asistencia a nuevos actos hasta que no se le aclare el lugar que ocupan las hermandades en el escalafón de la diócesis". Dos: Aprovechen para extasiarse con sus detalles antes de que sea desmontado para su mudanza y regreso a la Basílica. El palio de la Macarena apura sus últimos días en el Ayuntamiento. En la semana del 9 al 15 de febrero regresa al Arco. Y tres: Un andamio en la calle Gallinato obligará a San Bernardo a cambiar su recorrido de ida a la Catedral. ¿Habrá detectado el Cecop el obstáculo con el Google Street View?
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