Partido de pretemporada entre el Betis y la Fiorentina. / RBB
La Copa del Rey para mucha gente significa una competición menor, un torneo secundario en el que a veces no se le da toda la importancia que se debería a una victoria o una derrota. Todo esto, encima, se puede acentuar si hablamos de un equipo que milita en Segunda División. Pero ese equipo es el Betis, que no se puede permitir caer eliminado en la segunda ronda de la competición del KO bajo ningún concepto.
En un duelo a partido único todo puede ocurrir y dos debacles seguidas pueden dejar muy tocado no sólo a la plantilla, sino a Julio Velázquez. El Llagostera, que saltará al campo con los menos habituales, viene con ilusión, con ganas de competir y de repetir lo que hicieron hace dos campañas, cuando llegaron a dieciseisavos de final y cayeron frente al Valencia.
El conjunto verdiblanco afronta el enfrentamiento contra al cuadro catalán sumergido en un mar de dudas después de perder estrepitosamente el domingo ante la Ponferradina por cuatro goles a uno. El técnico bético aún no ha sido capaz de encontrar ni estilo propio ni un patrón completamente definido. Lo que sí se ha podido ver en los tres partidos ligueros que se han disputado es a una escuadra jugando al contragolpe, que mete miedo cuando ataca, pero que por muy poco que hagan los rivales, casi siempre le consiguen crear graves problemas a la hora de defender.
El entrenador vallisoletano ya afirmó ayer que hará rotaciones. La primera de ellas entre los tres palos, donde tantas polémicas se han suscitado tras las declaraciones de Adán la semana pasada y que han terminado con Kike Burgos, preparador de porteros que vino por petición del técnico verdiblanco, fuera de Heliópolis.
Dani Giménez va a afrontar su primer choque oficial como titular y, sin lugar a dudas, está ante su gran oportunidad. El rendimiento de Adán está siendo muy bajo y una buena actuación del vigués puede generar aún más debate en la portería.
La línea defensiva estará formada por Bruno y Caro, que tienen que ser los jefes del centro de la zaga, estando respaldados por Molinero y Casado. Piccini no entró en la convocatoria por problemas físicos. La pareja de pivotes defensivos, probablemente, se rompa por primera vez. Sin NDiaye (concentrado con Senegal), Velázquez deberá decidir si apuesta por Xavi Torres o Lolo Reyes. El centro del campo lo completarán Nono y Kadir, con la intención de que el alguien distribuya el juego y le lleguen balones a los hombres de ataque con más facilidad.
Precisamente arriba es donde más posibilidades tiene el cuadro heliopolitano con Rubén Castro, Cejudo, Jorge Molina, Pacheco y Rennella. La presencia de este último parece clara después de haber salido como suplente en Liga y haber realizado buenas actuaciones, aunque todos tienen bastantes opciones de jugar.
En las dos últimas temporadas en Segunda División, los precedentes coperos son muy diferentes. Mientras que en la 2009-10, con Tapia, el Betis era eliminado por el Córdoba (1-2) delante de su afición en la misma ronda que se disputa hoy, en la 2010-11 ocurrió todo lo contrario. En esta, los pupilos dirigidos por Pepe Mel superaron al Salamanca, al Granada, al Zaragoza, al Getafe y llegaron a cuartos de final frente al poderoso Barcelona. Los culés fueron demasiado para los béticos, pero la imagen mostrada fue muy buena y, aunque la eliminatoria estuviera ya sentenciada con el cinco a cero del choque de ida, en el Benito Villamarín consiguieron ganar 3-1 y darle una alegría a toda su afición que sirvió como impulso para el ascenso.
La alegría que vivieron en aquel curso los seguidores verdiblancos es lo que debe intentar activar Velázquez, que tendrá la oportunidad de sacarse una espinita en el plano personal y avanzar en una competición en la que sólo con el Poli Ejido tuvo resultados positivos. Con el Villarreal y el Murcia, fue eliminado del torneo del KO a las primeras de cambio.
El Betis deberá salir ante su público con la motivación extra que aporta un nuevo torneo y sin menospreciar a su rival. Los de Santi Castillejo llegan a Sevilla hoy y con algunas ausencias destacadas: Perea sigue recuperándose de su lesión; Valho, Aimar y Ríos arrastran diversas molestias; y el técnico navarro ha dado descanso a René, Alcalá y Jordi López.
Todo está preparado. Velázquez sabe que no puede permitirse un tropiezo y que lo que se juega no es sólo una eliminatoria, sino empezar a consolidar la confianza y el respeto de todos.
Posibles alineaciones:
Betis: Dani Giménez, Casado, Caro, Bruno, Molinero, Lolo Reyes, Kadir, Nono, Cejudo, Rubén Castro y Rennella.
Llagostera: Moragón, Pi, Jorge, Ruyman, Masó, Barnils, Pitu, Tarradellas, Rico, Querol y Juanjo.
