Cofradías

Máster en Semana Santa

La empresa cultural Alminar imparte durante esta Cuaresma un curso práctico sobre cofradías.

el 14 mar 2014 / 21:34 h.

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15584607 Así de cerca pudieron ver los alumnos de los cursos anteriores las artes del bordado cofradiero en los talleres de Elena Caro. La Cofradología (o Cuaresmática) ha quedado confirmada como disciplina científica. A los especiales, suplementos, programas, libros, estudios, conciertos, conferencias, proyecciones, pregones, clases al aire libre, tarareos en el autobús, cornetazos en la radio del coche y rutas callejeras, entre otros muchos instrumentos de su metodología, se añade desde esta semana la cuarta edición del curso especial de Semana Santa organizado por la empresa cultural sevillana Alminar. Tiene esta especie de máster una ventaja clara: que es en la calle, pateándose los sitios, yendo a los lugares claves, que es como se viven, se respiran, se personalizan, se tunean y se metabolizan estos conocimientos esenciales sobre sevillanía. «La Semana Santa de Sevilla no se puede definir solo como devoción a las imágenes», sostenía el responsable de la empresa, Daniel Antón, en las horas previas a la primera de las excursiones didácticas del curso. «Para entender de una forma completa esa semana que dura todo el año, hay que conocer también su historia, su artesanía, su folclore, su arte…, y es lo que abordaremos en esta cuarta edición, todo lo que compone y rodea a la semana grande de Sevilla». La cita inaugural era el Arquillo, y el título de la actividad era El Buen Fin, la hermandad franciscana. Se trataba de descubrir «la historia y el patrimonio de la hermandad visitando la exposición del Círculo Mercantil». También de analizar su patrimonio artístico, «y detalles como la curiosa explicación de uno de los posibles orígenes de la advocación de la Virgen de la Palma, la cual está relacionada con el milagro de que un fallecido despertó para denunciar ante la Inquisición cómo un hereje había blasfemado contra la Virgen. Otros dicen que es debido a la ubicación original de la cofradía, en la iglesia de San Juan de la Palma y/o porque la palma es símbolo de victoria y ascensión». Pero esto ya fue esta semana que ahora termina. La próxima convocatoria está fijada para el jueves día 20 en un lugar cuyo nombre, para el sevillano tradicional, son palabras mayores. San Vicente, un parroquia histórica, se titula la visita. «Se cuenta que la iglesia se levanta donde hubo una basílica visigoda, lo cual nos hace ver la historia de este lugar y de la parroquia», dice Daniel. «Cuando Fernando III el Santo entró en Sevilla dividió la ciudad en 24 collaciones, siendo una esta, la de San Vicente. Sería ya en el siglo XIV cuando se levantaría la iglesia gótico-mudéjar. Ese recorrido hace que no sea de extrañar que albergue a hermandades como Las Siete Palabras o Las Penas. Contemplaremos el arte que encierra esta iglesia pero también descubriremos la historia de estas hermandades, como cuales son las cinco hermandades que conforman la Hermandad de Las Siete Palabras. Gracias a la fusión durante varios siglos de todas esas hermandades hace que la actual tenga una particular cuádruple condición: hermandad sacramental, cofradía de penitencia, hermandad de gloria y hermandad de ánimas. O también descubriremos como en el claustro principal del convento Casa Grande del Carmen, situado en la calle Baños, estuvo en una hornacina mural hasta el siglo XIX recibiendo culto de los carmelitas calzados una efigie de Jesús caído en tierra en la advocación de las Penas». Un taller bordado en oro: he ahí la tercera ruta, el miércoles 26 de marzo. Y si San Vicente eran palabras mayores, a estas ya ni se les ve la punta, de altas que están: San Lorenzo. Lo explica el responsable de Alminar: «La artesanía es parte fundamental de la Semana Santa. Por ello visitaremos uno de los talleres de bordados más reputados, el de Sucesores de Elena Caro. En esta sesión abordaremos la historia de esta artesanía, sus variantes, su influencia y sus principales representantes, como Esperanza Elena Caro». 15584603Para rematar el curso como Dios manda, La Macarena, un barrio cofrade. «En esta sesión discurriremos por las calles de este barrio antiguo e íntimamente relacionado con el mundo cofrade», adelanta Daniel Antón. Con especial atención a los orígenes de la hermandad. Un monje de la orden basilisa, «fray Bernardo (o Hernando) de la Cruz, quería crear una hermandad que asistiera al nuevo hospital, igual que hacían los de la Caridad. Tras intentarlo atrayendo a varias cofradías ya constituidas decide crear una nueva, apoyado por el gremio de hortelanos, en el convento de San Basilio el Magno. Era la Cofradía de nuestra señora de la Esperanza ¿Dónde estaba ese convento? ¿Cuándo se trasladó a San Gil la hermandad? ¿Por qué?» Aspirantes a cofradólogos, diríjanse a daniel@alminar.net.

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