La secretaria general del PP , María Dolores de Cospedal, será la nueva presidenta de las Cortes de Castilla-La Mancha con mayoría absoluta, tras lograr ayer 27 diputados para la cámara regional por los 22 que logró el candidato y hasta ahora presidente, José María Barreda.
Con este resultado, la secretaria general de los populares logra dar un vuelco histórico en su comunidad autónoma, dado que la hegemonía de los distintos gobiernos socialistas llevaba 28 años consecutivos hasta el día de ayer. Al igual que en el resto de España, el PSOE ha sufrido un fuerte varapalo en esta comunidad autónoma, aunque dada la tradición socialista de la zona aún guardaba ciertas esperanzas en una victoria que amortiguara en cierta medida la desazón que corría ayer tanto por la sede de Ferras como por las del resto de España. Al final, no hubo elemento alguno para suavizar la caída.
También duele esta victoria en el seno del partido socialista porque confiaban en ganar los comicios a la secretaria general del PP, lo cual hubiera dejado en entredicho la labor de De Cospedal en el organigrama de los populares a nivel nacional.
La ganadora, visiblemente emocionada y arropada por sus compañeros de partido que la jaleaban "presidenta, presidenta", señaló que el PP ha ganado las elecciones autonómicas de forma "clara y rotunda" y que no defraudará a sus votantes.
Por su parte, y tras reconocer su derrota, el candidato Barreda dio las gracias a todas las personas que han trabajado en su proyecto y a los ciudadanos que le han votado, pero reconoció que hay que "aprender de lo que ha ocurrido hoy". "Hemos recibido un aviso muy claro y contundente", explicó el candidato. En declaraciones a los medios, Barreda indicó que lo primero que hizo fue llamar a su oponente, María Dolores de Cospedal, y felicitarla por haber ganado en los comicios.
Cae extremadura. Si dolorosa fue la derrota en Castilla-La Mancha, también lo fue en la comunidad de Extremadura, donde el Partido Popular consiguió mayor número de escaños que el PSOE por primera vez en su historia. El candidato del PP, José Antonio Monago logró la victoria al hacerse con el 46,44% de los votos y 32 escaños, a uno sólo de la mayoría absoluta.
Los socialistas, con Guillermo Fernández Vara al frente, podrían pues salir del poder que han ostentado desde 1983 al lograr el 43,22% de las papeletas y 30 escaños. Izquierda Unida, por su parte, se alzó con el 5,58% de votos lograría tres escaños, mientras que el 1,12% conseguido por UPyD no le daría ningún diputado en el Parlamento de la comunidad extremeña.
Fernández Vara señaló que tiene la "conciencia de haber hecho todo" aquello que estaba en sus manos. "He hecho todo lo que he podido, no me he guardado nada de mi tiempo, de mi esfuerzo, y ahora, que los ciudadanos decidan", resaltó ayer el candidato del PSOE y actual presidente extremeño.
