Gary Medel, puro temperamento.
Gary Medel fue en la noche del martes el protagonista en el programa de SFC TV, A Balón Parado. El chileno volvió a mostrarse tal cual es. Un jugador de los que dejan el alma en el terreno de juego. Entrega que, además, le gustaría sellar con éxitos en la capital andaluza. Quiero lograr algo con el Sevilla, ganar un título con el Sevilla. Sólo vivo el presente del Sevilla y quiero ganar el sábado, dijo.
Quizás por eso, precisamente, reconoció lo poco que le gusta perder. Pero sobre todo porque a nadie le gusta perder. Yo me cabreo mucho. En Pamplona terminé muy enfadado. No hicimos las cosas mal pero no se dio la situación de ganar, aclara el centrocampista.
En este sentido, el ex de Boca Juniors explica que en todos los partidos tengo ganas de morder pero me tengo que controlar porque me suben las revoluciones, pero trabajo eso día a día. Soy de sangre caliente y a veces reacciono sin pensar como en el derbi, que fue algo en el momento y no lo pensé pero al minuto me arrepentí mucho. A veces me cuesta mucho manejarlo pero mis compañeros me ayudan día a día. En los entrenamientos cuando sufres una entrada fuerte me pongo rabioso pero tratas de controlarlo. Sé que tengo que cambiar porque a veces he perjudicado al equipo.
Además, si algo tiene Medel es que jamás arroja la toalla. Sabe de la difícil empresa que tienen por delante este sábado pero, a la vez, se muestra con las ideas muy claras. El Valencia es un rival muy difícil pero se puede ganar, sobre todo en casa que estamos haciendo las cosas bien y espero que este sábado salgamos adelante, desea el chileno.
Y una de las claves para conseguirlo, cree, debe estar en la grada porque sabe que en los momentos más difíciles es donde tiene que salir el sevillismo real, el que todos conocemos. A las malas sólo están unos pocos pero ellos nos van a apoyar aunque la situación no esté muy buena. Ahora más que nunca tienen que estar a nuestro lado y apoyarnos a muerte. Siempre tratamos de hacer las cosas bien aunque a veces sale y otras no, concluyó.