En torno a 600 familias de Utrera pretenden acogerse a las ayudas de la Ley de Dependencia que tramita la Junta de Andalucía. Las primeras gestiones para mejorar la vida de los dependientes y también de sus cuidadores pasan por la Concejalía de Servicios Sociales.
Desde su entrada en vigor, se dio prioridad a la evaluación de los casos más graves, lo que no impide que se presenten demandas de situaciones menos complejas. En el caso de Utrera, desde principios de este año, se incrementó a cinco el número de evaluadores con objeto de que puedan visitar a 30 personas a la semana, dada la elevada demanda.
El director de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Utrera, José María Barrera, manifestó ayer que "ya están comenzando a llegar las primeras resoluciones". En concreto, corroboró que se trata de "50 dictámenes de las primeras solicitudes enviadas y que corresponden a grandes dependientes a los que se les asigna su ingreso en las residencias del entorno".
De momento, la ciudad cuenta con una cantidad inicial de 97.661 euros -para estos primeros seis meses del año- destinados a la puesta en marcha de las ayudas a domicilio, contempladas también en la Ley de la Dependencia. Es una cantidad abierta y que podrá aumentar en función de las necesidades.
Para poner en práctica esta medida, Servicios Sociales convoca un concurso público con objeto de que se presenten las empresas interesadas y opten a ofrecer esta prestación.
En cuanto al proceso para acceder a las ayudas para dependientes, las familias deben primero presentar su solicitud en Servicios Sociales.
Luego el Servicio Andaluz de Salud (SAS) elaborará un informe médico de la situación de la persona, que estudiará posteriormente un valorador, que a su vez presentará una propuesta al Ayuntamiento de Utrera, con la que redactará un programa de intervención para cada caso concreto y se ofertarán a la familia tres posibles opciones para elegir la más adecuada. Una vez acordada, la Consejería de Bienestar Social le dará visto bueno definitivo.
