El entrenador del Betis, Pepe Mel, ya tiene a Portillo y no quiere oír hablar de más fichajes. No porque no los desee, que los desea y también los pide, sino porque su equipo se enfrenta el domingo a un rival directo por el ascenso. "Los fichajes son el Sporting de Gijón", ha dicho este viernes, en la rueda de prensa previa al choque de El Molinón. "Es un partido lo bastante importante como para ponerme a hablar de fichajes. Es tan importante lo que nos viene por delante que hablar de fichajes nos distrae. De nada vale que vengan los mejores del mundo si en Gijón no damos la talla", ha advertido. En ese encuentro estará Portillo, tal como ha confirmado el técnico. "Se ha entrenado como uno más, viene de entrenar excepto estos dos días y por tanto mañana hará el segundo entrenamiento y tomaremos la decisión. Lo normal es que esté, salvo que pase algo o el chico diga que está cansado", ha dicho. Luego ha resumido lo que espera del malagueño. "Sabemos lo que da por delante de un pivote defensivo. Puede jugar por izquierda y derecha, de enganche... Y si juegas con dos pivotes también te lo puede hacer por dentro. Se asocia bien, es dinámico... Me parece interesante. Cuando ha jugado contra nosotros, sobre todo con Manuel Pellegrini, nos ha hecho mucho daño", ha recordado. Como en ese punto se le ha insistido por la política de refuerzos, Mel ha añadido: "Mi actuación ha sido llamar al chaval para que escuche del entrenador lo que piensa. Eso siempre es bueno. Lo demás escapa de mí, de mis posibilidades y de mi trabajo. Lo lleva la secretaría técnica. Yo sólo me he ocupado del jugador y de convencerle. El que venga debe querer venir y saber que el Betis es un grande, más allá de que esté en Segunda. Portillo me dijo desde el primer día que estaba ilusionado", ha explicado.
