Se cerró el mercado de invierno y la síntesis en el Betis es tan simple como que sólo hubo un fichaje, el central brasileño Paulao, y tres salidas: Momo rescindió su contrato para marcharse a la UD Las Palmas, mientras que los canteranos Ezequiel y Juan Calahorro se fueron cedidos al Sabadell y al Xerez, respectivamente. Los movimientos no abundaron, pero tan poca chispa ha acabado provocando una serie de incendios que no serían normales si no fuese porque se trata del Betis. El interés del Celtic en Jorge Molina y la sucesión de declaraciones de su agente, la extraña negociación por Vitolo, el cruce indirecto de opiniones entre Pepe Mel y Vlada Stosic... De todo hubo en los últimos días y las últimas horas del trasiego invernal menos fichajes y sólo ayer, una vez superada la marejada propia del fin del mercado, intentó el entrenador recuperar la tranquilidad necesaria para hablar como lo que es, el entrenador de un club en el que es imprescindible la sintonía entre la dirección deportiva y el máximo responsable técnico. Sintonía que por cierto no es la ideal ni mucho menos.
Por partes, lo primero que dejó el cierre del mercado de enero fue la confirmación de que Jorge Molina seguirá vistiendo el verdiblanco del Betis, no del Celtic. Existe en Heliópolis bastante malestar con el representante del delantero, Domingo Sevillano, enzarzado desde hace días en una cruzada personal para demostrar que el conjunto escocés se interesó de verdad por su cliente. En el Betis no lo desmienten, pero niegan que a última hora llegase una oferta de 1,5 millones de euros por un futbolista por quien ellos apenas han pagado 400.000 euros de los 1,6 pactados en su día con el Elche.
La secuencia de los hechos, siempre según la versión del club, es que efectivamente el martes por la tarde recibieron un correo electrónico del Celtic pero reenviado por Sevillano. En el mensaje, el club católico venía a reiterar su interés por el jugador al mismo tiempo que se disculpaba, por llamarlo de alguna manera, por no poder satisfacer las exigencias verdiblancas y quedarse sólo en una cesión con opción de compra. Pero en ese e-mail no aparecía ninguna nueva propuesta, como defendió Sevillano durante el martes.
El interés por Vitolo, un centrocampista de banda de la UD Las Palmas que lleva algún tiempo en la agenda bética, también fue el origen de otra controversia. La noticia, destapada por el presidente del club canario con el punto de partida de que el Betis ofrecía 300.000 euros por una cesión, fue desmentida por la dirección deportiva... un día antes de que Mel admitiese que la negociación era real. La contradicción, una más entre las dos esferas más importantes de la parcela deportiva en Heliópolis, reabrió el debate de las disensiones entre Vlada Stosic y Mel, aunque el entrenador se mostró ayer más político que nunca cuando le preguntaron por el asunto en Radio Sevilla al hilo del caso Molina
"Ellos han peinado el mercado y al final ha habido cosas que no han podido ser. No merece la pena echar la vista atrás. Estoy contento con los jugadores que tengo. Y si Vlada ha dicho que esa oferta [del Celtic] no existe, yo creo a Vlada Stosic. La comunión entre nosotros es buena", dijo el míster madrileño, que además reiteró su conformidad con que el peso de los refuerzos recaiga ahora en la dirección deportiva. "El año pasado tuve un desgaste brutal. Además, los mercados de invierno no suelen dar buenos réditos y por eso no le he prestado especial interés. Hemos mejorado en aligerar la plantilla, en los demás temas he dado dos pasos atrás", explicó.