Hoy se celebran en Alemania elecciones legislativas y, previsiblemente, la actual canciller Angela Merkel repetirá en el cargo. No obstante, la gran incógnita que se plantea es con qué fuerza política formará gobierno, aunque todo apunta a que serán los liberales los que se conviertan en su socio de coalición.
Todos los sondeos coinciden en señalar al partido de Angela Merkel, la Unión Cristianodemócrata (CDU), como la formación vencedora de las próximas elecciones alemanas. Se estima que obtenga alrededor del 35% de los votos -resultado similar a los comicios anteriores- aunque la segunda fuerza política del país, el Partido Socialdemócrata (SPD), liderado por el actual ministro de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, cede en intención de votos y se sitúa casi diez puntos por debajo del CDU. Como consecuencia de esto, los partidos pequeños han aumentado su popularidad entre los alemanes.
La actual canciller, física de profesión, ingresó en el CDU en 1990 y consiguió su primer escaño en el Bundestag; un año después se convirtió en ministra de Familia, Mujer y Juventud y en 1998 fue nombrada secretaria general de su partido. Quien la conoce, asegura que "es trabajadora como una abeja, tiene grandes facultades analíticas y es capaz de construir estructuras en medio del caos". Merkel accedió a la cancillería alemana en 2005 tras ganar las elecciones generales.
Aunque todo depende de los resultados de hoy, los análisis vaticinan que los partidos mayoritarios tendrán que formar coalición para poder llegar al poder, y son ya varias las posibilidades que se plantean. Merkel se convirtió en canciller hace cuatro años al frente de una coalición entre la CDU, su hermanada Unión Socialcristiana de Baviera (CDS) y el SPD, una decisión que tanto los cristianodemócratas como los socialdemócratas rechazan en público en esta ocasión. Es por esto por lo que parece que la opción más probable sería un gobierno formado por el (CDU/CDS) y el partido liberal (FDP), ya que ambos han expresado su deseo de coaligar y este último partido anunció que solo contempla esta alternativa.
No obstante, siempre puede haber sorpresas y podría suceder que los liberales, a los que se les pronostican el 12% de los votos, deban continuar en la oposición por no alcanzar la cifra que el partido de Merkel necesita para coaligar. Esto obligaría al CDU y SPD a aliarse de nuevo, pese a la resistencia de ambos.
