Míchel, entrenador de Olympiacos, fue trasladado de urgencia a un hospital de Atenas con problemas en la vesícula que estaban a punto de provocar una pancreatitis por infección. El extécnico del Sevilla sintió molestias durante el entrenamiento matinal, por lo que fue trasladado a una clínica. Míchel permanecía anoche ingresado, con lo que no podrá dirigir a su equipo ante el Panthrakikos, en el partido de vuelta de semifinales de la Copa griega.