Javeir Carcaño, conducido ante el juez.
Esto es lo que el joven ha dicho al juez después de que éste le preguntara dónde está el cuerpo de Marta. Es la única pregunta que el asesino confeso de la joven contestó en la audiencia preliminar del jurado, ya que se acogió a su derecho a no declarar cuando fue preguntado por una carta que envió a su hermano, Javier Delgado, el pasado mes de febrero.Miguel sólo admitió que él es el autor de la carta, pero se negó a pronunciarse sobre el contenido de la misma, tal y como pedía el abogado de Javier. En ella, el joven dice que es un “cabeza de turco” y vuelve a exculpar a su hermano como ha hecho hasta ahora. Javier y su novia, María García, sí declararon, ratificando de nuevo su inocencia. “Lo único que tengo en esa casa [por el piso de León XIII] es el cepillo de dientes”, dijo María. El abogado de Javier, de hecho, volvió a solicitar el sobreseimiento de la causa, mientras que todas las defensas han pedido que el caso sea juzgado por un tribunal profesional y no por un jurado como han vuelto a pedir las acusaciones. La familia ha pedido que se pronuncie el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), ya que al respecto ya se ha pronunciado una instancia superior como es la Audiencia Provincial, que confirmó la causa con jurado.
En la vista, que se prolongó durante más de 13 horas, también se oyeron dos conversaciones entre Javier y Miguel, en la que el primero le dice a modo de coletilla: “A veces me da coraje ser tan listo”. Además, también se reprodujeron unas conversaciones entre la familia de Camas con la que convivía Miguel y el joven, después de que éste fuera expulsado de la casa.
En cuanto a las declaraciones de la familia de Camas, fuentes del caso señalaron que fueron muy contradictorias, pues no dieron la misma versión de lo que hicieron la noche de autos. Rocío, ex novia de Miguel, ratificó ante el juez la declaración que realizó el pasado mes de septiembre ante la Policía, en la que dijo que Miguel Carcaño se deshizo del cuerpo en una arboleda en Camas. Ayer, Rocío dijo que estaba dispuesta a señalar a la Policía la zona que le indicó Carcaño e insistió en que Miguel abandonó la vivienda de Camas de madrugada. La menor, de 15 años, estuvo declarando durante casi dos horas. En la sala la escuchaban, además del juez y las partes, los cuatro adultos implicados, aunque no la veían porque testificó tras una mampara. Allí volvió a contar que Miguel salió sobre las 1.20 o la 1.30 horas del 25 de enero de la casa de Camas, donde se dejó el móvil.
Según la menor, Miguel le dijo entonces que tenía que ir a arreglar un asunto con su hermano, momento en el que le confesó que entre él y Javier Delgado habían matado a Marta y que luego la enterraron en Camas. La menor fue preguntada por una de las defensas el por qué de sus cambios de versiones, a lo que Rocío contestó: “Si he mentido a la Policía, miento a cualquiera”. En cambio, la madre de Rocío dijo que sabe “que ahora dice la verdad por su mirada”. En cuanto a las supuestas amenazas que recibió para que no contara esta versión, la menor dijo que ella nunca señaló a Javier, sino que ella reconoció la voz de la persona que le llamó entre varias voces que le puso la Policía, que fue la que le señaló que la voz que había marcado era la del hermano de Miguel, que el jueves le interpuso una querella por esta acusación. La abuela de la joven fue preguntada por la ropa que llevaba Miguel esa noche. Ella, que salió de la sala lanzando besos a las partes, reconoce que lavó la ropa, pero dice que no vio nada raro porque “no veo bien”.
Los padres de El Cuco también prestaron declaración. La madre del menor negó que su hijo cogiera su coche para trasladar el cuerpo de Marta porque sólo tiene una llave del vehículo y que siempre la lleva consigo. Además, afirmó que esa noche el menor volvió a casa sobre las 23.30 horas y que no volvió a salir en toda la madrugada.
