La evaluación definitiva de los daños materiales causados por la lluvia se remitirá a última hora de la mañana del día 29 a la Subdelegación del Gobierno en Sevilla, después de que los técnicos municipales hayan realizado un informe de la situación y los vecinos afectados por la tormenta hayan acudido a la mencionada oficina para ayudar a los perjudicados, según informó ayer el alcalde del pueblo, Francisco Salazar (PSOE).
Por el momento, lo que ya se ha concluido son las labores de limpieza del municipio, donde ayer ya se había retirado todo el barro y la maleza que provocó la fuerte tromba de agua tras arrastrar este material desde la sierra de San Pablo. Según el regidor, se han comenzado a reparar todas las infraestructuras que sufrieron daños por la tormenta. Respecto a la valoración de las pérdidas que causaron las lluvias, indicó que sólo se ha hecho una primera estimación y que no será hasta el día 29 cuando se pueda hablar de cifras concretas por el desastre.
Además de la docena de vecinos que ya se han acercado por la oficina a solicitar ayudas, el alcalde comentó que el primer día ya había contabilizadas 11 viviendas afectadas, aunque aclaró que algunas de ellas pueden coincidir con las solicitudes hechas en la ventanilla. El regidor recordó que el pasado miércoles los servicios de emergencia recibieron más de 100 llamadas a consecuencia de las fuertes lluvias que cayeron sobre la población.
Esta imprevisible tromba de agua abrió un socavón en las inmediaciones del centro de salud, levantó el asfalto y provocó atascos en céntricas calles del municipio como la Ronda, Hornos y Villamartín, donde los operarios municipales se han empleado a fondo para retirar todo el fango acumulado. También se han tenido que apuntalar varias tapias por el peligro de derrumbe y actuar en los accesos al municipio por la acumulación de barro y maleza procedentes del monte.
Un total de 44 efectivos han participado en estas tareas, entre operarios de obras y servicios municipales, miembros de la Policía Local, Protección Civil y bomberos, que también tuvieron que rescatar a personas atrapadas en el interior de sus vehículos.