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Montilla fija las elecciones el mismo fin de semana que el Barça-Madrid

La cita será el 28 de noviembre, un mes después de la huelga.

el 07 sep 2010 / 20:05 h.

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José Montilla, ayer durante su comparecencia pública.
El presidente de la Generalitat, José Montilla, anunció ayer que las elecciones catalanas serán finalmente el 28 de noviembre, un mes después de la huelga general, tres semanas después de la visita del Papa Benedicto XVI a Barcelona y el mismo fin de semana que el clásico de fútbol Barça-Real Madrid, que se jugará ese fin de semana en el Camp Nou.


Con esta distancia de margen, Montilla tratará de minimizar las eventuales consecuencias que puedan tener para el PSC la convocatoria de huelga general, que además de haber abierto una brecha entre los socialistas y el sindicato UGT, también podrían desgastar electoralmente al partido; sobre todo en sus caladeros de voto tradicionales situados en las zonas densamente pobladas y barrios periféricos del área Metropolitana, el conocido como cinturón rojo, semillero de votos del PSOE. Montilla también recibirá a Benedicto XVI, jefe de estado, con todos los honores y no como presidente en funciones.
El president terminó su intervención de ayer de anuncio de elecciones pidiendo (en castellano) "juego limpio" y solicitando a los votantes que se informen a fondo de las diversas propuestas en juego y decidan en libertad, y les instó a ser conscientes, ya que su voto decidirá el camino que debe seguir Cataluña e influirá a "toda una generación".

 

Tras el anuncio de Montilla, el líder de la oposición catalana y presidente de CiU, Artur Mas, aseguró sentirse preparado para liderar el "cambio" político en Cataluña, tras haber aprovechado los siete años de "travesía del desierto" en la oposición como una "escuela de humildad y modestia". En su alocución, Mas echó la vista atrás para constatar que, pese a la amargura vivida durante dos legislaturas por verse relegado a la oposición habiendo "ganado" las elecciones, ha aprendido muchas lecciones: "No hay mal que por bien no venga", sentenció. "Ir a la oposición cuando ganas las elecciones no es agradable. En un primer momento, la reacción es de incomprensión, y es humano que así sea. Pero todo tiene su proceso y estos años en la oposición han sido una escuela de aprendizaje, una escuela de humildad y de modestia".


Mientras, la candidata del PPC a la presidencia de la Generalitat, Alicia Sánchez-Camacho, afirmó que con las elecciones catalanas "el PP puede ser partido de gobierno" y emplazó a los catalanes a acudir "masivamente" a las urnas. La presidenta regional de los populares en Cataluña afirmó que su partido "puede ser decisivo en un próximo Gobierno" y leyó los comicios en clave de "oportunidad" para iniciar "una nueva etapa". Desde Madrid, la portavoz del Partido Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, criticó que Montilla ha-ya esperado tanto para convocar elecciones con un proyecto político y un tripartito "caducados".


largo alcance. Por su parte, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, garantizó que su compromiso de impulsar el desarrollo del autogobierno en Cataluña "va más allá" de las elecciones porque se trata, dijo, de un compromiso "de fondo, de largo alcance".

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