Foto: @infoMorante
El ancho altavoz de Twitter ha vuelto a convertirse a convertirse en el tablón de anuncios más inmediato del toreo: Ronda vivirá una tarde histórica con la reaparición de Morante para lidiar en solitario toros de Juan Pedro Domecq. Así lo ha asegurado la empresa del coso rondeño cerrando cualquier tipo de duda sobre la vuelta del diestro de la Puebla, que vestirá las galas dieciochescas de majo para convertirse en el máximo protagonista de la LVII Corrida Goyesca de Ronda.
Era la confirmación definitiva de una noticia que había avanzado Antonio Barrera, apoderado del diestro sevillano, señalando en su cuenta personal que tras probarse ayer en el campo, y aunque sigue con su intensa rehabilitación, Morante estará listo para torear el sábado, afrontando uno de los acontecimientos que habían despertado mayor expectación en la temporada 2013. El propio Francisco Rivera Ordóñez, empresario del coso rondeño, ha empleado la misma red social para confirmar la buena nueva: Confirmo con una grandísima satisfacción que Morante reaparecerá en la Goyesca. Ya no hay dudas.
El pasado fin de semana había tenido que desistir de reaparecer, tal y como era el deseo del torero, para participar en la corrida televisada desde Mérida, mano a mano con Alejandro Talavante y ante toros de Zalduendo.
Morante resultó herido el pasado 10 de agosto en Huesca por el primer toro de su lote, un ejemplar de Gerardo Ortega que le alcanzó en la ingle propinándole una brutal cornada que necesitó de tres horas de intervención en la enfermería de la plaza. Después de la operación realizada en la enfermería fue ingresado en el hospital de San Jorge de Huesca antes de ser trasladado a la clínica Quirón de Zaragoza, que abandonó el pasado día 16 de agosto para trasladarse a la Puebla del Río para iniciar una intensa rehabilitación que todavía no ha concluido pero que ya no le impedirá estar listo para torear la Goyesca.
Una goyesca para la que sonó el nombre de Morante desde comienzos de la campaña, especialmente a raíz del sorprendente brindis que Morante dedicó a su compañero Rivera en la última Feria de Abril. Aquel monterazo sirvió para zanjar las diferencias que arrastraban ambos toreros a consecuencia de las declaraciones de Morante sobre la concesión de la Medalla de Oro de las Bellas Artes al actual Paquirri. Pero, como suele ocurrir en el toreo, la brecha abierta entre ambos no ha sido lo suficientemente ancha para impedir este acercamiento que abre un nuevo tiempo para la Goyesca. El acuerdo con Morante supone, de paso, una nueva orientación taurina del tradicional festejo rondeño, basado en los últimos años en la alternancia de los hermanos Rivera Ordóñez, hoy retirados de la profesión.
El único matador que se ha encerrado en solitario en la Goyesca de Ronda ha sido Paco Ojeda, que despachó seis ejemplares de Torrestrella en 1987 en la cúspide de su carrera. El genio de Sanlúcar firmó aquella tarde una de las cumbres más importantes de su legado taurino que pertenece ya por derecho propio a los anales de la bicentenaria plaza de la Real Maestranza de Ronda.
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