Un jugador uruguayo de la Liga de Veteranos de La Coruña, Marcos Suárez Rosano, falleció este domingo en un hospital de la ciudad gallega como consecuencia de un choque fortuito que se produjo en el partido que disputó su equipo, el Bemantes, el pasado sábado. El futbolista, que fue incinerado hoy en la localidad coruñesa de Fene, sufrió el fatal choque con un rival cuando ambos disputaban un balón aéreo. Fuentes de su equipo explicaron a EFE que el jugador se precipitó al suelo y volvió a golpearse la cabeza. Dos ambulancias se desplazaron al campo, en la localidad coruñesa de Miño, para atender al jugador sudamericano, al que consiguieron reanimar, según las mismas fuentes. El futbolista, apuntan en el Bemantes, fue ingresado en el hospital Juan Canalejo de La Coruña, donde se le diagnosticó un coágulo en el cerebro que era inaccesible. El triste desenlace se produjo en cuestión de horas y Marcos Suárez, que había cumplido recientemente 45 años, deja mujer y un hijo adolescente. En el club lo definen como un "atleta, un tío sano" cuyas pasiones eran "su mujer, su hijo, su trabajo y el fútbol". El Bemantes aplazará los próximos partidos de la Primera División de la Liga de Veteranos de La Coruña a la espera de decidir si sigue adelante o deja la competición tras el trágico suceso.
