Un joven de 18 años, F.J.L.L., falleció en la tarde de ayer mientras trabajaba en la empresa Recuperaciones Aznalcóllar tras volcar una carretilla elevadora y caerle todo el peso de la máquina encima del cuello y el tórax, causándole la muerte de inmediato.
Los hechos tuvieron lugar a las 15.50 horas. Según afirmó el delegado provincial de Empleo, Antonio Rivas, tras recabar la información de los técnicos de prevención de riesgos laborales de la Junta de Andalucía, el joven estaba separando el metal de los plásticos y se puso a charlar con el conductor de la carretilla elevadora que estaba apilando chatarra. Ésta al parecer estaba desnivelada y se cayó a un lado aplastando a la víctima. El delegado provincial destacó que "hay una prohibición clara de estar bajo una máquina cuando se trabaja".
Rivas señaló que el joven estaba dado de alta en la Seguridad Social, hecho que se puso en duda al tener 18 años y tratarse de una empresa familiar. También apuntó a que, "en los próximos días va a pasar un inspector por la empresa para comprobar si han pasado algún curso de prevención de riesgos laborales", aunque no se han hallado anomalías.
Tras la llamada de un particular poco antes de las 16.00 horas, hasta el lugar de los hechos se trasladaron efectivos de Bomberos, Guardia Civil y Policía Local, así como técnicos de la Junta de Andalucía. La Guardia Civil de Sanlúcar la Mayor es quien se hará cargo de la investigación desde ahora.
Fuentes municipales apuntaron a que el joven, vecino de la barriada de Torreblanca (Sevilla), era familia de los propietarios: "Hermano de un yerno". Recuperaciones Aznalcóllar es una empresa familiar, con seis o siete empleados, que está dedicada al desguace y a la chatarra y se ubicó en el Parque de Actividades Medioambientales de Aznalcóllar (PAMA), creado en los terrenos de la antigua mina de Aznalcóllar, desde su inauguración en 2007.
El de Aznalcóllar es el segundo accidente laboral con fallecido en la provincia en lo que va de año, tras el que tuvo lugar el pasado 8 de enero en el polígono La Isla de Dos Hermanas. También en esa ocasión la víctima fue aplastada por el peso de una carretilla elevadora que él conducía. Se trataba de un joven de 23 años, J.A.H., que trabajaba en la plataforma de los supermercados DIA.
El hecho de ser una empresa pequeña y de no tener delegado sindical llevó ayer a UGT y CCOO a no quererse pronunciar sobre las condiciones del joven, a la espera de los datos de la inspección. No obstante, la secretaria de salud laboral de CCOO, Pilar Moreno, afirmó, tras lamentar la muerte, que "es una barbaridad que en estos tiempos muera una persona en accidente laboral, como en el siglo XIX".
