Un trabajador de 60 años, con 40 de experiencia y un puesto de responsabilidad en la obra, falleció ayer al caerle en la cabeza hormigón desprendido desde 20 metros de altura de una máquina mal limpiada cuyo perímetro no estaba protegido. Ocurrió en la manzana de La Florida, que Novaindes rehabilita para hacer 68 pisos de lujo y aparcamientos.
La víctima, jefe de obra de la subcontrata Rodio -que trabaja para la firma constructora, Dintel- murió al pasar por debajo de maquinaria peligrosa y recibir el impacto del cascote de hormigón, "de un tamaño como de dos veces su cabeza", según ejemplificó Rafael Migens, delegado sindical de Comisiones Obreras que se desplazó hasta la obra para verificar las condiciones en las que se estaba trabajando.
Se trata de la primera víctima mortal de la siniestralidad laboral en el sector de la construcción en la provincia de Sevilla, y la cuarta en accidente de trabajo.
Migens explicó que otros empleados de la obra aseguraron que el fallecido llevaba puesto el casco pero que la piedra le dio en la nuca, extremo que CCOO aún no ha verificado. Pero el delegado sindical añadió que el hombre estaba pasando por debajo de la máquina, cuyo perímetro no estaba protegido para impedirlo, por lo que consideró que no se estaban cumpliendo las condiciones de seguridad establecidas en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, lo que será comunicado a la Inspección de Trabajo "para que se tomen las medidas oportunas".
El bloque de hormigón se soltó de una máquina empleada para construir las pantallas -muros de contención- que se están realizando para trabajar con seguridad bajo tierra, en la cimentación y el aparcamiento subterráneo, indicó Migens, que detalló que esa máquina, "de grandes dimensiones y giratoria", tiene una pieza de chapa de 20 metros de longitud con la que se suelta el hormigón.
Esa chapa "no se había limpiado bien" y el cascote de hormigón se desprendió, cayendo desde una altura de unos 20 metros y dándole en la cabeza al trabajador con tal fuerza que provocó su muerte en el acto.
El servicio de asistencia sanitaria 061 recibió el aviso a las 9.35 horas, pero cuando los médicos llegaron a la obra, en la manzana de La Florida, situada entre Luis Montoto y Menández Pelayo, ya no pudieron hacer nada por salvar su vida.
La víctima es Manuel S.G., de 60 años, vecino de Mairena del Aljarafe y padre de cuatro hijos. Uno de ellos trabaja también para la constructora Rodio, al igual que un sobrino, que se encontraba en la obra de La Florida cuando se produjo el accidente mortal.
Ayer mismo se realizó la autopsia y el cadáver fue trasladado al tanatorio de la SE-30. Mañana a primera hora se determinará dónde y cuando se producirán el sepelio y el posterior entierro o incineración, según informó el tanatorio.
El delegado de CCOO, que ya ha contactado con la familia de la víctima, se refirió a que se trata del primer accidente mortal del sector de la construcción en Sevilla durante este año, y confió en que "sea el último", si bien criticó las condiciones que pudo comprobar en su visita a la obra.
Migens explicó que, además de no estar marcado el perímetro de riesgo para que no se pasara bajo de la máquina, había "bastante falta de organización, con los materiales por medio, lo que es peligroso porque hay muchos hierros", lo que tildó de inadecuado, sobre todo teniendo en cuenta que se trata de una empresa "solvente, con muchos trabajadores".
