Un obrero murió ayer tras caerle encima una plancha de hierro, que podría tener un peso aproximado de 1.500 kilos, cuando se encontraba en una de las vías de servicio que dan acceso a Sotogrande, en el término municipal de San Roque (Cádiz), según informaron a Europa Press fuentes del servicio de emergencias 112.
Los hechos se produjeron sobre las 14.30 horas, cuando la sala del 112 fue alertada de un accidente laboral en la vía de servicio de Sotogrande, en la salida 131 de la A-7 en sentido Málaga.
Se desplazaron hasta el lugar de los hechos personal sanitario, así como efectivos de bomberos, Guardia Civil y Policía Local, aunque no pudieron hacer nada por salvar la vida del trabajador.
Por otra parte, dos trabajadores de 40 y 46 años se encuentran en estado grave tras el accidente laboral que sufrieron el lunes mientras operaban con un tractor en una finca de la localidad cordobesa de Pozoblanco. Fuentes del Servicio de Emergencias 112 informaron a Efe de que el siniestro tuvo lugar alrededor de las 19.00 horas del lunes en la finca La Martita, ubicada en la calle Virgen de la Luna a tres kilómetros de la localidad cordobesa de Pozoblanco.
En el lugar se personaron agentes de la Policía Local, así como dos ambulancias del 061 que trasladaron a los dos trabajadores al centro sanitario de la localidad al presentar heridas de gravedad. El trabajador de 40 años presenta una fractura de pelvis y radio, mientras que su compañero de 46 años, que permanece ingresado el Hospital Reina Sofía, presenta un traumatismo torácico cerrado.
Agentes de la Guardia Civil de Pozoblanco investigan las causas que provocaron el accidente.
Fiscalía. La Junta de Andalucía remitirá a la Fiscalía el accidente laboral del obrero de origen marroquí fallecido el pasado sábado al caer de siete metros de altura de la obra en la que trabajaba en Albuñol (Granada), donde el empleado "llevaba el arnés puesto aunque sin estar sujeto a ningún soporte".
Así lo indicó ayer a Europa Press el delegado de Empleo de la Junta en Granada, Luis Rubiales, quien aseguró que el Gobierno andaluz "tendrá tolerancia cero" frente a los accidentes laborales y opinó que el acaecido en Albuñol "fue una cuestión de auténtica mala suerte, ya que el fuerte viento propició que el trabajador se cayera".
"No podemos dejar a la suerte la vida de las personas sino que hay que sistematizar las medidas de seguridad", comentó Rubiales. Entre las medidas puestas en marcha por la Junta para luchar contra la siniestralidad laboral, el delegado destacó que "Andalucía fue pionera" en firmar un convenio con la Fiscalía para remitirle todos los accidentes de trabajo con resultado de muerte y recordó la puesta en marcha de subvenciones permanentes, dirigidas fundamentalmente al sector de la construcción, para la sustitución de andamios.