Sor Celina, de 90 años y muy querida en Alcalá de Guadaíra, ha fallecido trágicamente en el convento de las Clarisas del municipio atrapada en el montacargas. La primera hipótesis indica que fue un accidente cuando la monja manipulaba el aparato.
Ocurrió este miércoles, pero no trasciende hasta ahora, entre otras cosas, porque el juzgado que lleva la investigación decretó el secreto de sumario mientras se esclarece la muerte de una monja muy querida en el municipio.
Los hechos ocurrieron en el propio convento ubicado en la céntrica calle Nuestra Señora del Águila, donde sor Celina estaba manipulando el montacargas y, por causas que todavía se desconocen, la hermana debió accionar por error el mecanismo que lo pone en funcionamiento. Por desgracia, quedó atrapada en su interior, donde falleció.
Los vecinos del convento contaron ayer que estuvieron alertados durante toda la mañana del miércoles ya que se extrañaron por las numerosas ambulancias, además del camión de bomberos, que se habían desplazado hasta el lugar, provocando incluso el corte del tráfico en esta concurrida vía. Más tarde los vecinos concieron la trágica noticia: la religiosa falleció por aplastamiento.
Sor Celina era muy querida y cuidada por el resto de la congregación ya que había dedicado gran parte de su vida al convento, por lo que era muy conocida por todos los vecinos. Había sido abadesa durante varios años aunque ya estaba retirada debido a su elevada edad y a que se encontraba enferma de alzhéirmer. La Policía Nacional no descarta la posibilidad de que precisamente esta enfermedad provocara un lapsus de memoria en la fallecida que probablemente accionó por error el mecanismo del montacargas que acabó con su vida.
