Dos niños de un año y tres meses, respectivamente, murieron el viernes en el incendio de una chabola próxima al poblado de El Salobral, ubicada a las orillas de la M-45, en el kilómetro 10,5 de la avenida de Andalucía (Villaverde, Madrid), dirección salida Madrid, según informó Emergencias 112 y la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Según indicaron a Europa Press testigos de lo sucedido, la infravivienda estaba ocupada desde el mediodía por cuatro hermanos -los dos fallecidos, así como una niña de tres años y otro de cinco-, junto a su abuela, de 70 años, que se encargaba de ellos mientras la madre trabajaba. De hecho, Saray, de unos 20 años, se había ido a su trabajo como limpiadora minutos antes del incendio. Un familiar de los niños, Estrella, relató que las llamas empezaron en el momento en el que la abuela estaba con la niña fuera de la chabola.
En unos pocos minutos, se desató un intenso fuego, del que pudo escapar el primogénito. Pero ya era demasiado tarde para entrar a salvar a los benjamines. "El tío Santiago y la propia abuela intentaron entrar. Las criaturas chillaban, pero no pudimos hacer nada porque la chabola era un infierno de madera. Mojamos mantas e intentamos abrirla, pero las llamas salían con mucha fuerza. María del Carmen se quería meter con todo el fuego pero no la dejamos porque se hubiera achicharrado", señaló la mujer.
Entonces, los familiares llamaron al 112 y al padre de las víctimas, que llegó al lugar de los hechos "derrumbado". Estrella explicó que los Bomberos "tardaron en llegar una hora" y fueron los agentes de la Policía los que se acercaron primeramente al lugar y se hicieron cargo de la situación.
La Policía en la tarde del viernes seguía realizando sobre el terreno las averiguaciones oportunas para determinar las causas del accidente, aunque todo apunta a que se deba a un cortocircuito, según informó a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de la Policía, que precisó también que no hay detenidos, aunque el padre prestó declaración.
