Un Centro comercial de l'Hospitalet (Barcelona) ha creado una sala a la que han bautizado como "aparcamaridos" y en la que los esposos o acompañantes pueden disfrutar de unos minutos de descanso mientras sus parejas realizan sus compras.
La sala, ubicada en el centro comercial Gran Vía 2, proporciona un ambiente relajado, un espacio donde leer el periódico o una revista, o incluso disfrutar de la serie preferida gracias a los amplios sofás y televisores de plasma que proporcionan la sensación de encontrarse "como en el salón de casa", tal como lo describió uno de sus usuarios.
Otra persona que se mostró satisfecha por esta iniciativa fue Víctor, quien explicó que estaba "contento" con la sala y añadió que "es bueno hasta para los que tienen mal los pies" y no pueden seguir andando de tienda en tienda.
Por el contrario, algunos de los clientes cuando descubrían la finalidad de la sala no se mostraban tan conformes con la idea, como en el caso de Paquita, que opinó que los maridos "deben ayudar y colaborar", por eso sugirió que "vayan a comprar como las mujeres". Por su parte, Vicente, su marido, reconoció que cuando su esposa va a comprar, él se solidariza "aunque sea esperándola en la puerta de la tienda".
Para otros, el concepto de 'aparca-maridos' es erróneo y "desfasado", como explicó Darío, que añadió que hoy en día las parejas "han cambiado", por lo que consideró que no es necesario que se instauren este tipo de salas.
Según explicó el director de marketing del centro comercial, Luís Alcalá, la idea de crear esta sala surgió de los propios clientes, y más concretamente de las mujeres, quienes solicitaron espacios donde sus parejas pudiesen relajarse mientras ellas proseguían con las compras.