Nano bromea con Sergio García en un entreno.
La primera vuelta del campeonato está a punto de acabar y hay un futbolista en el Betis que no ha jugado ni un minuto. Se trata de Nano y su moral, evidentemente, no es la mejor. "Es difícil ver que pasan las jornadas, que casi no me he perdido ningún entrenamiento, que ha habido opciones y rotaciones y que no, que no y que no. Lo tengo que aceptar, pero es complicado", lamentó ayer el central en Onda Cero, donde sin ánimo de generar polémica sí se quejó de su situación: "Hay algunas semanas que lo pasas peor, pero todos los días me dejo la vida entrenándome para demostrarle [al entrenador] que se está equivocando", indicó.A Nano le extraña, por decirlo de alguna manera, que no haya tenido la más mínima oportunidad. Por ejemplo, en Gerona, donde Antonio Tapia colocó a Nelson de lateral izquierdo. "Y yo llevaba un mes entrenando de lateral izquierdo", recordó. Es más, en verano "se me transmitió confianza por parte del club y del cuerpo técnico", refirió. "Llevo dos o tres palos gordos esta temporada, de creer que iba a jugar y no hacerlo", confesó el manchego, que casi se arrepiente de no elevar la voz: "A veces peco de ser demasiado bueno. En el mundo del fútbol parece que te toman más en serio cuando eres un poco más cabroncete, aunque prefiero pensar que no es así".
En vista de su situación, Nano no descarta nada en el mercado de enero: "Esta situación no es beneficiosa para nadie, ni para el club ni para mí", reconoció el zaguero, dolido aunque contenido: "Lo único que pido es tener un partido, como han tenido todos mis compañeros".
