El Gilena CF debutó en El Palmar de Troya con una sensacional imagen y un histórico resultado. Los pupilos de Juan Sánchez ganaron (0-3) gracias a una exhibición del delantero gilenense Nelson Rivero Romero (Gilena, 21-10-1991). El bautizo en Primera Provincial después de su última y única participación de 1994 ha multiplicado la expectación en la localidad, ávida de repetir los éxitos del anterior ejercicio. La historia de Nelson es la historia de un currante. Hijo de un albañil y criado en una familia humilde, el 9 pronto destacó en la Escuela Municipal de Gilena, desde donde emigró al Puntos Suspensivos FS, con el que fue convocado por la selección sevillana juvenil para varios torneos de carácter autonómico. Su carrera sobre el parquet prometía y en 2009 recibió la llamada del Clipeus Nazareno, hoy Real Betis FS. Querían ficharme, pero no podían pagarme y me tuve que volver. Para poder ir a los entrenamientos mi padre tenía que faltar al trabajo y todo. Hizo un esfuerzo enorme y el domingo cuando marqué los tres goles me acordé mucho de él, apunta sonriente. El curso anterior anotó 26 goles en un Gilena que logró el anhelado ascenso a Primera, una categoría a la que retorna 19 años después de su única singladura, en la que, curiosamente, sólo obtuvo un triunfo -1-2 ante el Estepa-. Nelson, de 21 años, confía en lograr la permanencia sin ningún contratiempo. Íntimo amigo del exsevillista Jairo Morillas, ahora en el RCD Espanyol B y con el que habla a diario, este delantero descarado y con fama de ratón sueña en la intimidad con repetir la proeza del triplete. Carmona, Badolatosa y UP Viso medirán el grado de madurez de un plantel que, a las órdenes de Juan Sánchez, quiere asumir el rol de Cenicienta. Y aún no es medianoche.
