El Betis consumó ante el Elche su peor racha en Segunda desde la prehistórica temporada 28-29. Han tenido que transcurrir 81 años y veinticinco campañas en la categoría de plata para que el equipo verdiblanco enlazase cuatro derrotas seguidas, pero el cataclismo que se anunciaba el sábado por la tarde quedó atenuado en parte el domingo gracias a los tropiezos de los dos equipos que adelantan a los de Pepe Mel en la clasificación. Ni el Rayo Vallecano ni el Celta ganaron, así que ninguno de ellos se escapa del Betis a pesar de su pésimo balance en los cuatro últimos encuentros.
Una vez disputada la 23ª jornada, el liderato pertenece al Rayo, con 49 puntos. El conjunto de Vallecas perdió ayer contra el emergente Tenerife de Antonio Tapia, que ganó por 2-1 con un tanto de Antonio Hidalgo de penalti y otro de Nino tras un error muy similar al que cometió Miki Roqué en la jugada del 0-1. La distancia entre el Betis y el Rayo, por tanto, se mantiene en tres puntos. La escuadra de José Ramón Sandoval, por cierto, puso fin a una extraordinaria racha de cinco triunfos consecutivos que le hicieron pasar de estar ocho puntos por detrás del Betis a adelantarlo en apenas un mes.
El segundo clasificado es el Celta, que saldó su visita al Córdoba con un empate sin goles bajo el diluvio universal (0-0). El equipo vigués, que sólo ha perdido dos partidos en lo que va de Liga, se pone ahora con 48 puntos, así que ha aumentado su ventaja sobre el Betis en un solo punto.
El gran beneficiado de la jornada es el Granada, que ya está a seis puntos del Betis.