Todos los niños andaluces que se encuentren en riesgo de exclusión social, vivan donde vivan, recibirán sus tres comidas al día durante el verano. Éste es el compromiso de la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, quien adelantó que se están estudiando varias fórmulas para no dejar a nadie «colgado». Explicó que las escuelas de verano con comedor se ponen en marcha en las Zonas de Necesidades de Transformación Social (ZNTS), es decir, en barrios deprimidos de toda Andalucía, pero indicó que actualmente hay niños que viven en zonas normalizadas, que se han incorporado ahora a situaciones de necesidad, a los que también hay que ayudar. Para atender a estos menores señaló que se está estudiando la posibilidad de abrir escuelas o llevarles la comida a domicilio, al igual que se hará con personas de la tercera edad. Manifestó su preocupación por las personas en situación de necesidad, que antes no tenía, «una clase media que lleva años sin trabajar, que ya no tiene ingresos o que son muy bajos para mantener a una familia». Y se preguntó: «¿Quién vive con 400 euros?», por ello insistió en que a estos nuevos pobres también hay que ayudar, «porque la emergencia social está incluida como una prestación básica en la Ley de Servicios Sociales de Andalucía del 88». Aclaró que no se está hablando de beneficencia, sino de ayudar a la gente que está apurada, «porque hay una ley que contempla que debes actuar». Respecto a las Zonas de Necesidades de Transformación Social, Sánchez Rubio indicó que se prevé abrir unas 55 escuelas de verano con comedor, una cifra similar a la del año pasado y en las que se atendieron a más de 4.500 niños. Insistió en que se van a «hacer las cosas bien. No se puede estigmatizar a los chavales. Hay que hacerlo dentro de la dignidad de la atención social», porque enfatizó en que esta atención es una responsabilidad pública. Críticas. Asimismo, criticó que algunas comunidades del PP se nieguen a apostar por el modelo andaluz de las escuelas de verano poniendo como excusa que se puede generar excesiva visibilidad que puede llevar a la discriminación: «Que no se visibilice no significa que no exista», a lo que apostilló que no se visualice a la gente que no come «no significa que no coma». Este plan de refuerzo alimentario está incluido en el decreto de inclusión social que aprobó el martes el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía y que ayer fue publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA). Esta norma beneficiará a más de 160.000 personas y destinará unos recursos adicionales de más de 64 millones de euros a paliar el impacto de la crisis económica en los colectivos más vulnerables de la comunidad autónoma, especialmente las personas desempleadas que no reciben ninguna prestación y las familias con todos sus miembros en paro. El decreto se sustenta en tres pilares: inserción a través del Empleo, plan extraordinario de solidaridad y plan extraordinario de garantía alimentaria.
