El fiasco ante el Levante podría haber provocado estragos en la alineación que Paco Chaparro dibujará mañana para medirse al Atlético, pero la cantidad de bajas en ataque librará a más de uno del ostracismo. Es el caso de Sobis, que ayer se confesó y analizó su bajo nivel desde que está en el Betis.
El equipo que saldrá al Vicente Calderón para intentar puntuar frente al Atlético es una incógnita, pero se antoja extraño que Sobis no sea uno de sus integrantes, más que nada porque es el máximo goleador entre los futbolistas en disposición de jugar a día de hoy.
Porque si la referencia es su aportación frente al colista... "Sé que no tuve una buena tarde, pero también sé que no fui el único. En general no hicimos un buen partido, así que vamos a esperar, el técnico está mezclando mucho en los entrenos, aunque estoy listo para jugar. Quiero jugar", se defendió.
Más allá de esa última actuación, el fichaje estrella de la pasada temporada continúa en su línea de no destacar casi nunca. Aprovechando su presencia en la sala de prensa de la ciudad deportiva, se le preguntó por ello: "En Brasil jugaba todos los partidos y tenía una regularidad muy, muy buena. Aquí todavía no la encontré, tengo que buscarla", alegó el atacante, que añadió: "Nadie juega mal porque quiere, yo no entro queriendo jugar mal, pero muchas veces no sale".
Sobis suele escudarse en su posición dentro del campo para justificar su mal rendimiento, pero últimamente ha actuado de mediapunta por el centro, su puesto favorito. "Cuanto más cerca de la portería, mejor. Todo depende de cómo vaya el partido. Si tu equipo tiene el balón, claro que juegas mejor ahí; si corres detrás del balón es más complicado. A mí me gusta jugar de delantero, pero contra el Barça me salió bien de mediapunta", recordó. Ante el Levante no ocurrió lo mismo y fue sustituido: "Era un momento en el que las cosas no le salían a todo el equipo y me tocó ser cambiado.
Es normal, alguien tenía que salir para ver si mejoraban las cosas", admitió.
En definitiva, otra ocasión perdida:"Te enfadas por tener una oportunidad y no demostrar lo mejor, pero no fui el único que hizo un mal partido, sino que no salieron bien las cosas. Uno depende del equipo. Estoy frustrado por no haber hecho un buen partido, pero contento porque llevo un tiempo jugando bien y un encuentro no va a cambiar esto", proclamó.
Faltaba saber qué opina el brasileño de la situación del Betis. "El míster ya habló con nosotros para seguir con la cabeza arriba, fue una derrota pero no podemos olvidar lo que hicimos antes. Ahora toca el Atlético, necesitamos tres puntos para salir de esta situación y ya demostramos que podemos hacer muchas cosas. Este equipo puede ganar a quien quiera y donde sea", auguró.
