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Noga niega que pactara con Sando la venta de Mercasevilla

La constructora no reclamó tras perder el concurso «porque no le dio la gana».

el 09 dic 2009 / 20:15 h.

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El recinto de Mercasevilla que se puso en venta.

"No tuvimos la percepción de haber sufrido ningún perjuicio". Eso es lo que el secretario general del Grupo Noga, José Ramón Lacasa, reiteró una y otra vez ayer a la juez que investiga las presuntas irregularidades en el concurso para la venta del suelo de Mercasevilla, al que se presentó esta constructora y que finalmente fue adjudicado a Sando.

Lacasa, que declaró ayer como testigo, dijo a la titular del Juzgado de Instrucción 6, Mercedes Alaya, que ni él "ni la empresa a la que representa se consideraron perjudicados en el momento del concurso". De hecho, Noga no llegó a impugnar el mismo, pues tras recibir un documento con el resultado y la valoración económica de todas las ofertas, consideró que "había recibido las explicaciones suficientes y dejaron zanjado el tema". Según Lacasa, su empresa "nunca ha impugnado ningún concurso o subasta" y que "la única razón" para no recurrirlo "ha sido el libre ejercicio de la facultad de hacerlo, por no decir que no lo han hecho porque no les ha dado la gana".

Sin embargo, estos argumentos resultaron poco convincentes a la juez que insistió en el tema, mostrándole al testigo todos los indicios de que "el concurso pudiera estar predeterminado" para que ganara Sando que constan en la investigación. Aún así, el testigo dijo que la empresa "no tiene la percepción de que estuviera predeterminado" y que para Noga es ya "un tema finiquitado". Es más, afirmó que el director comercial de Noga, que acudió a la apertura de las plicas, "no le dijo que a la media hora , ya se sabía cuál era la oferta ganadora", como éste dijo la semana pasada. Ante esta respuesta la magistrada llegó incluso a preguntarle si Mercasevilla, Noga y Sando estaban en "connivencia" para que el concurso lo ganara ésta última, a lo que Lacasa contestó con un "absolutamente falso".

Pero el tenso interrogatorio de la juez no se quedó ahí, pues le preguntó si en realidad la empresa no recurrió por los "muchos intereses" que tiene en Sevilla y evitar así que le perjudicara esos otros negocios. Lacasa admitió que Noga tiene numerosos proyectos en la ciudad, pero esto "no ha pesado para no reclamar perjuicio alguno".

La magistrada pasó entonces a preguntarle por las tres polémicas cláusulas del concurso y a los pormenores de la oferta de Noga. Lacasa dijo que "no conocía" el derecho de opción a compra que Sando tenía sobre los suelos, porque no estaba reflejado en las cláusulas del pliego de condiciones definitivo, aunque admitió que "lo adecuado" hubiese sido indicarlo. Aún así, aseguró, a preguntas del letrado del PSOE, que acudió al concurso "porque no observó ninguna ilegalidad en el pliego de condiciones".

Tras Lacasa, estaba previsto que declarara el vicepresidente de Noga, Nicolás Osuna Pedregosa, aunque la citación fue suspendida por problemas de agenda del testigo y, por ahora, no ha sido fijada para una nueva fecha.

Por otro lado, el portavoz del Grupo municipal del PP, Juan Ignacio Zoido se reunió ayer con el comité de empresa de Mercasevilla, tras lo que reclamó a la Consejería de Empleo que asuma las nóminas de los 40 prejubilados del expediente de regulación de empleo (ERE) de 2007, porque para la empresa es "inviable".

La juez casi imputa al secretario de la promotora

La mañana fue más que tensa en el despacho de la juez Mercedes Alaya. Su intenso interrogatorio provocó de nuevo tensiones entre los letrados, que, como ya hicieran el día que declaró Fernando Mellet, hicieron constar sus protestas en el acta. En concreto, se quejaron los abogados del PSOE y la defensa de Mellet por el “acoso” al testigo.

La tensión llegó a tal extremo que la magistrada, ante las respuestas del testigo, decidió hacer un receso en el que llegó a pensarse en imputarlo por obstrucción a la Justicia o falso testimonio. De hecho, a la vuelta del descanso volvió a recordarle que como testigo tenía la obligación de decir la verdad.A esto se unió la marcha del fiscal, quien abandonó la sala a las 13.20 horas, cuando llevaban hora y media de declaración, antes de que le llegara su turno de preguntas, según el acta.

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