El primer entrenamiento de la semana en el Betis trajo consigo una buena noticia para Pepe Mel y por supuesto para el protagonista, que no es otro que Nono. El joven mediocampista, alejado del trabajo junto al resto de la plantilla desde hace un par de semanas por una osteopatía de pubis, se reincorporó a la plantilla ayer mismo y además se le vio muy activo, por lo que también pasa a ser una opción para el centro del campo verdiblanco. Por la tarde, para no cargarlo demasiado tras su convalecencia, descansó, igual que Pozuelo, aquejado de un golpe desde el viernes.
El portuense, una de las apuestas más firmes de Mel en lo que a canteranos se refiere, venía arrastrando esos problemas desde hacía un tiempo y eso le estaba perjudicando. Los médicos le recomendaron entonces que parase un tiempo y el descanso le ha venido de maravilla. Ahora está por ver si el técnico lo incluye en la convocatoria para el choque del domingo. Nono no tiene minutos con el primer equipo desde el encuentro ante el Málaga del pasado 29 de septiembre.
OTRO JUVENIL A ESCENA. Y siguiendo con asuntos de cantera, Mel llamó ayer a un nuevo elemento, el guardameta Pedro López, que defiende la portería del juvenil de División de Honor, para ocupar el hueco que deja Fabricio, aún con un esguince de muñeca. Por la tarde apareció Ignacio, que repite después de su presencia la semana pasada.
