El Cajasol arriba a la última jornada de una nueva fase de la competición europea que disputa, la 'dichosa' EuroChallenge, y otra vez se le plantea un dilema: ganar al Ural Great ruso le clasifica para los cuartos de final, pero la victoria vendría con un plus de ajetreo que puede ser un martirio. O no.
¿Hasta qué punto merece la pena seguir vivos en una competición que difícilmente se va a ganar -y que en todo caso va a reportar escaso prestigio- si ello puede acarrear acabar muertos en la Liga ACB? Cuestión peliaguda que quizás no habría que plantearse siquiera, aunque está claro que del signo que registre el encuentro de esta noche en San Pablo se pueden derivar dos panoramas en cuanto a esfuerzos y exigencia diametralmente opuestos: a) la victoria, a la que por lo demás nunca se debe renunciar, llevaría al equipo sevillano a encarar una eliminatoria directa de cuartos, casi con toda seguridad ante el Triumph ruso, que implicaría un intenso programa de partidos, puede que hasta cinco, en apenas once días, a saber: este domingo en Badalona, ante el Joventut; el martes 17 en Lyubertsy, cerca de Moscú, ida ante el Triumph; el jueves 19 en San Pablo partido de vuelta; el domingo 22 de nuevo en casa ante el CB Murcia; y, por último, el miércoles 25 de nuevo en Rusia si fuera necesario el desempate.
La opción B, la derrota ante el Ural Great, clasificaría a éstos y permitiría a los de Pedro Martínez preparar con calma y toda una semana de entrenos en Sevilla el superimportantísimo encuentro ante el Murcia (la permanencia puede irle en ello) y luego, con igual holgura, el siguiente compromiso liguero, en Valencia el sábado 28 ante el Pamesa. Y así hasta el final.
Claro que lo primero es lo primero, y vencer al equipo de Perm no va a ser tampoco tarea tan sencilla como lo fue allí (61-72) aunque se pusieran los cinco sentidos: porque ellos también juegan y se la juegan, porque han cambiado de técnico (Aleksandar Kesar suplió a Roman Dvinyaninov) y van a más, como demuestra su amplio triunfo (83-57) ante el Proteas, porque estará el pívot serbo-bosnio Vanja Plisnic (13.4 puntos y 5.8 rebotes), que se perdió la ida... y porque en los locales no se podrán alinear ni Clay Tucker, ni Xavi Rey -no están inscritos-, ni Branko Milisavljevic, aunque sólo éste jugó en Perm.
