A la derecha, Rubén Rodríguez en el Brea. / EDD
Paso a paso. Ese es el ritmo marcado por la secretaría técnica del Club Deportivo Alcalá para la configuración del plantel deseado por Juan Ureña. La dirección deportiva blanquiazul se ha marcado para la semana que mañana comienza dos nuevos retos en cuanto a fichajes se refiere. El primero de ellos es la renovación del palaciego Salvi y, el segundo, fichar a Rubén Rodríguez, que este verano ya se ha comprometido con el Cerro.
Aprovechando el amistoso que los albiazules disputaron el pasado viernes en Los Palacios frente al Mosqueo, miembros del club alcalareño se pusieron en contacto con Salvi para ofrecerle una nueva propuesta de renovación. Sin embargo, el futbolista sigue pidiendo tiempo para poder ajustar su horario laboral con los entrenamientos. No obstante y según las fuentes consultadas por El Decano Deportivo, las posibilidades de que Salvi continúe vistiendo la elástica del Alcalá el próximo ejercicio se han multiplicado en las últimas horas.
Mientras tanto, el caso de Rubén Rodríguez es distinto. El atacante, que el curso anterior acabó jugando en el grupo XVII de Tercera División en las filas del Brea de Aragón, ya se comprometió con el Cerro a comienzos de este período estival, si bien firmó una cláusula con los de Hytasa en la que rezaba que si llegaba una propuesta más atractiva tanto económica como deportiva le concederían la carta de libertad sin ningún problema. El futbolista, padre de dos hijos, ya ha comunicado a ambas partes que firmará por el equipo que le ofrezca mejores condiciones. Pese a estar en dos categorías más baja y según pudo confirmar este diario, la ficha que el Cerro está dispuesto a pagarle es más apetitosa que la mostrada por el Alcalá, si bien los panaderos están intentando buscarle un trabajo al futbolista para satisfacer sus necesidades.
